La coagulación menstrual puede ser una condición normal para las mujeres, sin embargo, los coágulos pueden significar problemas más serios.
¿Qué son los coágulos?
Los coágulos en el útero generalmente se forman cuando la sangre se acumula. Uno de los signos significativos de un coágulo menstrual es la oscuridad de la sangre, mientras que la sangre que sale del cuerpo de manera más rápida suele ser de un rojo más brillante. Los coágulos ocurren porque el cuerpo está tratando de controlar su propio sangrado. Los coágulos de manchas en la piel se convierten en costras, pero los coágulos de sangre que se forman dentro del útero generalmente se eliminan del cuerpo. Si bien la aparición de coágulos ciertamente puede ser alarmante, a veces son bastante normales.
Causas de la coagulación menstrual
Para determinar si la presencia de coágulos menstruales es un problema grave, se deben determinar las razones o causas de los coágulos. A menudo se evalúa a una mujer que está experimentando problemas de coagulación para determinar su nivel de hemograma. Una caída en el hemograma podría significar la presencia de anemia, pero en muchos casos, las mujeres continúan teniendo un hemograma normal si la coagulación no continúa durante un período prolongado.
¿Por qué ocurre la coagulación?
- Cambios hormonales -Algunos coágulos de sangre ocurren debido a cambios hormonales por medicamentos, ovulación, períodos anormales y quistes ováricos. En la mayoría de los casos, estas causas no son graves. Sin embargo, pueden ocurrir problemas continuos en relación con los síntomas perimenopáusicos, cambios significativos de peso, medicamentos a largo plazo o enfermedades crónicas.
- Problemas uterinos -Los cambios o problemas en el útero también pueden causar la coagulación menstrual. Los fibromas, que son crecimientos benignos en la pared uterina, también son algunas de las causas más comunes de la coagulación.
- Útero agrandado -Un útero agrandado puede ocurrir en mujeres que han tenido múltiples embarazos. Debido a que el útero es más grande después del embarazo, la sangre puede acumularse y luego coagularse.
- Obstrucción cervical -Cuando se obstruye el flujo normal de la sangre menstrual, se puede detectar la coagulación. Las obstrucciones pueden ocurrir por una variedad de razones, incluida una disminución en los niveles hormonales.
- Endometriosis -El sangrado inusual, incluidos los coágulos de manchas, puede ser un síntoma de endometriosis.
Coágulos de sangre y embarazo
Los coágulos de sangre también pueden ser un signo de problemas en un embarazo. Para algunas mujeres, el sangrado leve o el manchado no son inusuales durante las primeras semanas de embarazo. Sin embargo, un sangrado y una coagulación más intensos pueden indicar que se está produciendo un aborto espontáneo. Los signos de un aborto espontáneo pueden diferir según la persona, pero algunos de los signos más comunes incluyen los siguientes:
- Dolor abdominal
- Dolor pélvico
- Dolor de espalda baja
- Sangrado y/o coagulación
Debe comunicarse con su médico si experimenta alguno de estos síntomas. Un sangrado significativo y/o coágulos de sangre pueden hacer que se sienta mareado y/o con náuseas.
Cuando llegue al médico, ¿qué debe esperar? Lo más probable es que su médico realice un examen pélvico. También se realizarán pruebas en su sangre y su orina. Por lo general, también se usa un ultrasonido para diagnosticar un aborto espontáneo. Es posible que su médico quiera realizar una prueba en los coágulos de sangre y cualquier otro tejido que sea evidente.
Periodos y Coagulación
Finalmente, aunque los coágulos no son inusuales durante un ciclo menstrual, comuníquese con su médico si ocurre lo siguiente:
- Los coágulos son más grandes que una moneda de veinticinco centavos.
- Los coágulos han ocurrido durante más de un día.
- Esta es su primera experiencia con coágulos menstruales.
Los coágulos menstruales no tienen por qué ser motivo de preocupación, pero ser consciente de sus funciones corporales normales y detectar síntomas anormales puede ayudarla a estar al tanto de cualquier cambio físico que su cuerpo pueda estar experimentando.