Para muchos, la parte más intimidante de las conservas es todo el equipo especial necesario. Afortunadamente, puedes improvisar todo lo necesario para procesar de manera segura un lote de conservas o mermeladas con elementos que seguramente ya tienes en tu cocina. Si sigues las fotos paso a paso verás como hacer herramientas para después hacer conservas.
Necesitarás:Cuando se procesan los frascos de alimentos en una olla de agua hirviendo, se debe utilizar una rejilla de algún tipo para elevar los frascos fuera del fondo de la olla. Esto se hace por dos razones. Una de ellas es para evitar que el vidrio esté en contacto directo con la parte inferior de la olla (el calor de algunas cocinas a veces puede ser demasiado para el frasco más cuidadosamente templado). La otra es que la rejilla permite que el agua hirviendo circule bien alrededor de los frascos, ayudando en la penetración del calor. Si tienes una rejilla de alambre redonda, es perfecto.
2Si no tienes una rejilla redonda que se ajuste a tu olla, puedes crear una con papel aluminio. Corta siete tiras de papel de aluminio de 2 centímetros de ancho. Enrolla las tiras para formar siete cuerdas metálicas individuales. Toma tres y forma con ellas un círculo, prensa los extremos para mantenerlos juntos.
3Pasa las cuatro restantes tiras de papel dentro y fuera del círculo en forma de zig-zag. Aprieta los extremos para asegurarlas con el círculo exterior.
4Ahora vamos a centrar nuestra atención en una manera segura para levantar los frascos calientes dentro y fuera del agua hirviendo. Hay pinzas especiales para hacer esto cuando cocinas conservas o esterilizas botes, pero se puede adaptar fácilmente un par de pinzas de cocina para hacer el trabajo.
5Envuelve una serie de bandas de goma alrededor de los extremos de las pinzas. Podrás ver cómo estas pinzas mejoradas dan mucho mejor agarre. Sólo ten cuidado al utilizarlas para quitar los frascos del agua hirviendo, ya que todavía puedes levantar agua caliente en los canales interiores de las pinzas.
6Otra herramienta útil durante el envasado es un embudo de boca ancha. Sin embargo, puedes hacerlo con sólo un vaso de plástico resistente al frío y calor, y un cuchillo o bisturí. Introduce con cuidado la hoja en el vaso hasta la mitad. Lentamente corta el plástico hasta eliminar la parte inferior. Este embudo de boca ancha mantendrá todo en su lugar.