Una de las claves para disfrutar de buena salud y de un aspecto físico atractivo es el ejercicio y una dieta saludable. Sin embargo, uno de los elementos que más pueden echar para atrás a las personas que no lo practican habitualmente y se están planteando hacerlo, son las temidas agujetas.
Las agujetas son una serie de dolores que aparecen después de realizar algún tipo de ejercicio y que, pasados unos días, desaparecen sin que tengamos que hacer nada para solucionarlas. Pero ¿sabes por qué duelen los músculos después de hacer ejercicio? Si quieres descubrirlo, sigue leyendo unCOMO y te lo contamos.
Qué pasa en nuestro cuerpo cuando hacemos ejercicio
Cuando practicamos deporte o ejercitamos el cuerpo en el gimnasio, así como cuando realizamos alguna actividad física intensa de cualquier tipo, estamos haciendo trabajar a nuestros músculos. Los músculos son órganos de nuestro cuerpo que se encargan de moverlo. Junto con los huesos y los tendones, forman el aparato locomotor del cuerpo de los animales, incluido el ser humano.
Los músculos están formados por células que se agrupan formando fibras. De este modo, estas fibras se pueden tensar o relajar, haciendo que los músculos se flexionen o permanezcan en estado de reposo. Esta capacidad de las fibras musculares para tensarse es lo que hace que los músculos se muevan y, a medida que más se mueven, se vuelven más duras y resistentes.
De hecho, cuando realizamos alguna actividad física a la que no estamos acostumbrados, lo que estamos haciendo es forzar los músculos para que realicen un esfuerzo más allá de lo habitual. De esta manera, los músculos empiezan a crecer y a tomar una textura más sólida, ya que entienden que, como estamos realizando esta actividad, nuestro cuerpo necesita contar con músculos más fuertes, por lo que las células que forman las fibras musculares aumentan su desarrollo normal.
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Por qué duele el cuerpo después de hacer ejercicio
Sin embargo, cuando entrenamos o hacemos ejercicio después de que haya pasado mucho tiempo sin tener actividad física, es muy común que aparezca ese característico dolor muscular después de entrenar. Este dolor se suele manifestar como pinchazos en los músculos que hemos ejercitado, que es lo que hace que se conozcan popularmente como "agujetas". Es decir, un dolor punzante similar al que sentiríamos si nos clavasen agujas en la zona entrenada.
Estos dolores no surgen de forma inmediata una vez que se completa el entrenamiento, sino que, por el contrario, suelen hacer su aparición al día siguiente, y alcanzan su máxima sensibilidad y dolor a los dos días del trabajo físico. A partir del tercer día, este dolor va remitiendo lentamente y, al final, termina por desaparecer sin que tengamos que hacer nada.
Este dolor es la consecuencia de un ejercicio excesivo en los músculos. De hecho, esto explica que aparezcan solo cuando se empieza o retoma el ejercicio, ya que, cuando el músculo está habituado al entrenamiento, no aparecen las agujetas. Esto se debe a que las agujetas en realidad son roturas de las fibras que forman los músculos.
Por qué tengo dolor muscular durante el ejercicio
Muchas veces puede que sintamos dolor en los músculos y articulaciones durante el ejercicio. Esto podría ocurrir por dos motivos principales:
- Estamos haciendo mal los ejercicios: y, por ende, el músculo se vería dañado.
- Aún tenemos agujetas del ejercicio anterior: y, por ello, nos duelen los músculos al entrenar.
Como hemos visto, cuando entrenamos estamos forzando al músculo a desarrollarse, a alcanzar sus límites y, en consecuencia, a forzarlo para que crezca. Sin embargo, esto conlleva que, en algunos casos, aunque el músculo en su conjunto no lo note, a nivel interno sufra roturas. Estas roturas de las fibras musculares son microscópicas. A pesar de ello, debido a que se producen en muchos lugares diferentes del músculo y repartidas a lo largo y ancho de las fibras musculares, el resultado es que el músculo se resiente de forma importante.
De este modo, a medida que las microrroturas de las fibras musculares empiezan a cicatrizar y a curarse, el músculo manifiesta dolor. Sin embargo, cuando estas roturas microscópicas de las fibras musculares se curan del todo, el músculo vuelve a estar sano, así como más fuerte que antes. Así pues, mientras que el músculo permanezca fuerte, no volverá a sufrir agujetas hasta que, de nuevo, con el ejercicio, se supere su límite de aguante. Es decir, si repetimos el entrenamiento que nos dio agujetas, ya no las sufriremos cuando el músculo se haya acostumbrado a ese trabajo, sino que tendríamos que exigirle un trabajo superior para que se volvieran a producir microrroturas en las fibras musculares.
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Por qué me duelen los músculos sin hacer nada
Como acabamos de ver, normalmente el dolor muscular suele aparecer después de hacer ejercicio, pero... ¿qué pasa si me duelen los músculos sin hacer nada? En este caso, puede deberse simplemente a tensión muscular. Cuando pasamos por épocas de estrés, nuestros músculos suelen tensarse, al igual que nosotros. Esta tensión suele acumularse en la zona alta de la espalda, concretamente en la zona de los homoplatos y las cervicales.
De ser este el problema, además de tratar de deshacernos del estrés, es conveniente que busquemos la relajación muscular mediante pomadas o bolsas de agua caliente. Si el dolor es demasiado fuerte y no desaparece, otra opción es recurrir a un especialista, sobre todo si las tensiones musculares son muy frecuentes.
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Cómo evitar las agujetas después de entrenar
Desgraciadamente, a día de hoy no existe ningún remedio efectivo para evitar las agujetas o el dolor de los músculos después de entrenar. Tomar medicamentos de venta libre como paracetamol o ibuprofeno ayudarán a soportar mejor el dolor. Sin embargo, hasta que sea el propio músculo el que sane de forma natural, el dolor no desaparecerá por completo.
No obstante, aunque las agujetas no se puedan curar, sí que se pueden prevenir. Para ello, bastará con llevar a cabo los entrenamientos de forma paulatina. Es decir, si levantamos pesas, ir aumentando el peso de forma controlada y evitar los sobreesfuerzos innecesarios. Esta forma de entrenar será más lenta a la hora de ver los resultados. Sin embargo, como el estrés muscular será menor, se conseguirán evitar, o por lo menos minimizar, las agujetas después del entrenamiento, lo que nos permitirá seguir entrenando sin problema y conseguir nuestros objetivos de una forma más pausada pero también más inteligente.
Ahora que ya sabes por qué duelen los músculos después de hacer ejercicio, puede que también te interese este otro artículo de unCOMO sobre Cómo entrenar con agujetas.