El bienestar emocional es un área de vital importancia en el desarrollo óptimo de la persona a todos los niveles.
La mayoría de nosotros llevamos a cabo hábitos saludables que nos aportan bienestar emocional, incluso aunque no nos demos cuento de ello o de hasta qué punto influyen en nuestra felicidad.
Por otro lado, los hábitos que repercuten positivamente en la salud emocional nos ayudan a vivir mejo en una amplia variedad de situaciones y nos pueden generar un gran bienestar también a nivel social, personal o familiar.
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¿Cuáles son las ventajas de mantener hábitos saludables en el bienestar emocional?
En muchos aspectos, la salud física y la salud emocional forman parte de lo mismo: estas facetas de la vida están interconectadas entre sí, de manera que rutinas como ir a practicar deporte varias veces a la semana, dormir las horas suficientes o comer sano tienen un efecto positivo en fenómenos psicológicos como nuestra capacidad de concentración, nuestras aptitudes a la hora de mantener el control en situaciones estresantes, etc.
Algunos de los hábitos con ayor capacidad de generar una influencia positiva en el bienestar emocional son los siguientes:
- Crear pautas de organización del tiempo.
- Practicar ejercicio regularmente.
- Aplicar un horario de sueño consistente.
- Practicar Mindfulness.
- Comer alimentos cocinados.
- Mantener una vida social activa.
- Mantenerse en constante aprendizaje.
Así, existen una serie de ventajas que nos aporta la realización de dichos hábitos saludables y que influyen directamente en el bienestar emocional; estas son las más destacables.
1. Aportan orden a nuestras vidas
La organización es esencial en todos los aspectos de la vida de una persona. Y para lograr mantener un estado de organización óptimo en nuestro día a día, las rutinas emocionalmente saludables son clave.
Algunos de los hábitos que nos permiten mantener el orden en nuestras vidas son: cumplir un horario diario durante la semana para levantarse y acostarse a la misma hora; realizar las comidas también en horarios similares de un día a otro o hacer ejercicio en las mismas franjas horarias sin que suponga un detrimento para el descanso nocturno.
Realizar actividades de relajación o activación cada día también nos puede ayudar a organizarnos y a mantener un óptimo estado de bienestar emocional, algunas de estas actividades pueden ser la meditación, el Mindfulness, el deporte o bien actividades de ocio y hobbies personales que nos llenen y estimulen.
Llevar a cabo actividades que nos permitan estructurar el día a día también es imprescindible para lograr los objetivos que nos hemos propuesto y nos ayuda a evitar la procrastinación.
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2. Ayudan a mantener el equilibrio emocional
Mantener unos hábitos saludables en el día a día también nos ayudan a dormir correctamente por la noche, lo cual repercute positivamente en nuestro equilibrio emocional, hecho que se traduce en un mayor rendimiento tanto en las horas de trabajo como en las de ocio.
Resulta evidente deducir que una persona que haya descansado bien durante la noche o que mantenga un horario constante de horas de sueño diarias, será más proclive a desempeñar correctamente sus tareas y obligaciones semanales y, de nuevo, su bienestar emocional repercutirá en todos los aspectos de su vida cotidiana.
Tener unos patrones de sueño estables por la noche se relaciona directamente con la salud mental, así como en el bienestar físico y emocional de cada uno de nosotros.
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3. Ayudan a prevenir el estrés
Organizar de manera correcta nuestra agenda diaria y las actividades que desempeñamos tanto a nivel personal como doméstico o profesional, es un hábito con el que también se pueden prevenir los casos de estrés excesivo.
Las situaciones estresantes a menudo pueden surgir de un trabajo muy exigente, de las relaciones interpersonales diarias o bien de las responsabilidades ligadas a la vida en pareja, al cuidado de los hijos o a la vida familiar en general.
La desorganización es una de las fuentes de malestar más habituales en muchas personas que se acaban encontrando desbordadas por no saber planificar sus actividades diarias, motivo por el cual la planificación y la organización son tan importantes para cualquier persona.
Algunas actividades que nos pueden ayudar a prevenir o reducir el estrés son la lectura, el deporte, la meditación, ver una película, escuchar nuestro álbum de música favorito o quedar con los amigos para ponerse al día.
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4. Mejoran la autoestima
Unos buenos hábitos emocionales también se relacionan con el hecho de quererse a uno mismo y con el autocuidado, es decir, con todo aquello que hacemos para sentirnos mejor con nosotros mismos.
La autoestima es una parte fundamental en la vida de todos los seres humanos, ya que es uno de los indicadores principales que definen su forma de ser, su personalidad y la manera como se relaciona tanto consigo misma como con las personas que están a su alrededor.
Es por eso que manteniendo diariamente unos hábitos que influyan positivamente en nuestro bienestar emocional como una higiene personal óptima, hacer deporte o tener una vida social activa también podremos mejorar nuestro nivel de autoestima y prevenir alteraciones relacionadas con la misma.
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5. Aportan autonomía y previeen casos de dependecia
Las personas capaces de ser felices llevando a cabo hábitos emocionalmente saludables que les generan bienestar, no necesitan depender de la presencia constante de otras personas para llevar una vida plena y satisfactoria.
Por el contrario, buscar la felicidad fuera de nosotros o en otras personas puede ocasionar situaciones de dependencia que a la larga suelen ser negativas a nivel emocional y psicológico.
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6. Bienestar general
Como se ha indicado, la salud es un fenómeno global; por ello, las rutinas saludables de una persona influyen positivamente en su manera de pensar y de interpretar la realidad, lo cual le ayuda a disfrutar de su desarrollo social.
Todas las ventajas que aportan las rutinas emocionalmente saludables anteriormente mencionadas se retroalimentan entre sí y promueven un bienestar general en la persona que se traduce a todos los ámbitos de su existencia.
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