A lo largo de la vida las personas pueden llegar a experimentar varias crisis personales y de diferente índole, siendo estas una señal de que algo en nuestra vida debe ser atendido, por lo que es importante detectar todas las señales y tratar de descubrir el origen.
Y es que una crisis personal podría llegar a ser una oportunidad de crecimiento, pero para aprovecharla, es importante comprender cómo nos afecta emocionalmente y cuáles son sus implicaciones.
En este sentido, existen diversos tipos de crisis personales, y aquí veremos cuáles son y qué los caracteriza.
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¿Qué es una crisis personal?
Una crisis personal o crisis vital son aquellos momentos de transición o cambio que resultan tan conflictos de afrontar y es por ello normalmente por lo que suelen provocar que nos sintamos desbordados y pensemos que no seremos capaces de salir de esa situación. Como podremos ver más adelante, las personas podrían llegar a vivir a lo largo de su vida diversos tipos de crisis personales.
Por otro lado, algunas crisis podrían llegar a estar interrelacionadas al haber sido causadas por los mismos sucesos (p. ej., a causa de la pandemia que comenzó a finales del año 2019 por el virus del covid-19 las personas han llegado a sufrir diversos tipos de crisis personales, como pueden ser familiares, de salud o económicas, entre otras).
Algunos de los síntomas más comunes de las crisis personales que podríamos tener son los siguientes:
- Estrés y ansiedad.
- Apatía, tristeza e incluso depresión.
- Tener la sensación de que es difícil encontrar una salida o una solución ante la situación que se está viviendo.
- Preocupación obsesiva.
- Aislamiento.
- Irritabilidad.
- Insomnio.
- Desorientación y desconcierto.
- Inestabilidad a nivel emocional.
- Abandono del cuidado personal y pérdida de hábitos de vida saludables.
- Frustración.
Esto no quiere decir que todas las personas que experimenten una crisis vayan a sufrir todos estos síntomas; sin embargo, esto nos puede servir como orientación para que nos hagamos una idea del proceso por el que podríamos llegar a pasar al vivir una experiencia así en nuestra vida.
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Los diferentes tipos de crisis personales
Podemos encontrarnos con diferentes tipos de crisis personales, cada una de ellas causadas por unos factores distintos; aunque cabe destacar que muchas de ellas podría estar interrelacionadas o también podrían llegar a vivirse de forma simultánea (p. ej., experimentar una crisis evolutiva al mismo tiempo que una crisis familiar).
A continuación vamos a explicar de manera breve en qué consisten los diferentes tipos de crisis personales y cuáles podrían ser las causas para que se lleguen a producir.
1. Crisis evolutiva
Uno de los tipos de crisis personales serían las crisis evolutivas que se encuentran asociadas a los diversos cambios que se producen en las distintas etapas de la vida. Suelen estar relacionadas con algunas transiciones que se encuentran marcadas por la edad.
Cuando una persona pasa de una etapa de la vida a otra (p. ej., de la etapa de la adolescencia a la etapa de la adultez o de la adultez a la etapa de la madurez, etc.) se podrían llegar a desarrollar unos cambios bastante notables y a causa de ella la persona podría tener que replantearse ciertas cosas (p. ej., sus creencias, ideas, sentimientos, etc.).
Normalmente algunas crisis evolutivas se producen con mayor intensidad, como pueden ser las que se desarrollan durante la adolescencia al ser una etapa de grandes cambios (p. ej., desarrollo físico, necesidad de una mayor independencia y privacidad, interés por las relaciones sentimentales, etc.) o al llegar a la vejez (p. ej., jubilación, cambios en la rutina, etc.).
Además, durante estos tipos de crisis personales asociadas a cambios evolutivos se necesita tomar una serie de decisiones con el fin de adaptarse a diferentes niveles, como puede ser el social o el académico y/o profesional, entre otros.
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2. Crisis familiar
Aquí entran en escena todos aquellos altercados y sucesos complicados que giran en torno al plano familiar de la vida de las personas.
Cabe destacar que la forma en que vivimos nuestras experiencias familiares y también el cómo nos relacionamos con los diferentes miembros de nuestra familia, especialmente durante nuestra infancia y adolescencia, nos marca y, además, cuando vivimos algunos momentos complicados que giran en torno a nuestra familia podríamos llegar a experimentar varios tipos de crisis familiares (p. ej., crisis asocial al alejamiento o la proximidad con nuestros familiares, asociadas a las interrelaciones entre los miembros de nuestra familia, sucesos complicados dentro de una familia, etc.).
Por otro lado, la familia es un pilar fundamental en la vida de las personas, por lo que las crisis familiares pueden llegar a suceder a lo largo de todas las etapas del desarrollo vital y también pueden tener un papel importante detrás de algunos episodios personales.
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3. Crisis asociada a enfermedades o problemas de salud
Entre los diferentes tipos de crisis personales se pueden encontrar las crisis asociadas a enfermedades o problemas de salud, especialmente en aquellos casos en los que tienen la suficiente gravedad como para llevar a una persona a hacer varios cambios en su vida con el fin de mejorar su salud o, al menos no empeorar y así tratar de tener una mayor calidad de vida. Además, este tipo de crisis podrían desarrollarse durante un largo periodo de tiempo en función de la severidad de los síntomas que se están experimentando y de la gravedad de esos problemas de salud o esa enfermedad.
Por otro lado, este tipo de crisis suelen ser especialmente preocupantes cuando los problemas de salud suponen grandes cambios en la vida de una persona. A veces son necesarios unos reajustes a nivel laboral e incluso social. En cualquiera de los casos resulta imprescindible que la persona afectada haga los cambios necesarios para incorporar esa experiencia en su vida de tal manera que pueda abordarla y asimilarla de la mejor manera posible con el fin de sufrir lo menos posible.
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4. Crisis social
Otro de los tipos de crisis personales son las que se conocen como crisis sociales, que serían aquellas que se producen a causa de situaciones en las que se producen cambios recurrentes y/o muy intensivos o inestabilidad en torno a las relaciones interpersonales con personas del entorno habitual de una persona (por ejemplo, amigos, compañeros de trabajo, etc.), de manera que una persona ante ello podría llegar a sentirse sobrepasada.
Ante este tipo de crisis es habitual que una persona tome una serie de decisiones que vayan orientadas a cambiar la forma de relacionarse con los demás e incluso puede que se opte por un cambio de entorno con el fin de empezar de cero y buscar nuevas amistades con las que intentar tener unas relaciones más sanas y con menos altibajos o cambios bruscos en torno al vínculo que los une.
Por otra parte, las crisis sociales también podrían llegar a producirse a causa de un infortunio o cualquier desastre que pudiera llegar a alterar la forma habitual de desenvolverse dentro de una comunidad o una sociedad.
5. Crisis económica
Las crisis económicas también se encuentran entre los distintos tipos de crisis personales, aunque esta se produzca a nivel global; sin embargo, cabe incluirla dentro de las crisis personales puesto que aquí nos referimos a la forma en que una persona experimenta personalmente una crisis económica que le está afectando tanto de manera directa como indirecta, ya que podría llegar a experimentar una amplia variedad de cambios en su vida (p. ej., ver una reducción notable del salario o de las ganancias, perder el trabajo, tener serias dificultades para llegar a fin de mes, etc.).
Cabe mencionar que las crisis económicas suelen tener un gran impacto a nivel psicólogo o mental para las personas, por lo que es importante que se tomen medidas para ayudar en el plano psicológico de las personas, en lugar de buscar sólo el pragmatismo creyendo que todo se arregla con dinero y empleo; aunque esto también es importante ante este tipo de crisis. Sin embargo, nunca se debería dejar de lado la salud mental y más ante unas situaciones que desencadenan tantos problemas a nivel global como suelen ser las crisis económicas.
6. Crisis amorosa o de pareja
En esta clasificación acerca de los diferentes tipos de crisis personales cabe destacar las crisis amorosas o de pareja; estas se podrían llegar a desencadenar a lo largo de una relación que llega a ser poco estable. Y es que aunque dos personas sean bastante compatibles y por más que se cuelguen en la relación, las relaciones demandan una serie de adaptaciones de manera mutua entre ambos miembros de la pareja y, como cada persona es diferente, a veces es normal que surjan una serie de desencuentros que deben resolverse.
Ante este tipo de crisis, en función de la gravedad, muchas veces las personas involucradas deben tomar una decisión acerca de si consideran que deberían continuar con su pareja tras resolver el problema que pudiera haber desencadenado la crisis o si, por el contrario, lo mejor sería poner fin a la relación.
Con ello no queremos decir que este tipo de crisis sean porque la relación de pareja sea tóxica, ya que podrían desencadenarse por diversas causas totalmente razonables (por ejemplo, no ponerse de acuerdo sobre si tener hijos o no, formalizar o no su relación, irse a vivir juntos, etc.).
7. Crisis existencial
Por último, vamos a explicar las crisis existenciales, que serían aquellas que sirven a raíz de una serie de conflictos internos de una persona en los que podría llegar a estar detrás la idea de que la vida carece de sentido. En algunos casos, también podría entrar en juego en este tipo de crisis la confusión acerca de la propia identidad personal o la incapacidad para poner rumbo en la vida en busca de un propósito.
Cuando una persona experimenta una crisis existencial es posible que sienta apatía y anhedonia y una insatisfacción de manera generalizada incluso en aquellos casos en los que aparentemente las cosas estén marchando bien. También es posible que se tenga un sensación de extrañeza consigo mismo y se empiece a cuestionar incluso hasta sus propias decisiones, siendo especialmente particular de este tipo de crisis el miedo al futuro al vislumbrar de manera pesimista.
Como hemos podido ver, existen diversos tipos de crisis personales, siendo todas ellas lo suficientemente importantes como para afectar de manera notable en la vida de las personas, por lo que sería aconsejable que se busque ayuda profesional cuando alguien esté sufriendo mientras está viviendo alguna crisis; sobre todo cuando esta crisis es duradera.
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