El jengibre es una popular planta que cuenta con numerosas propiedades para la salud. Algunas de sus características son, por ejemplo, que es un antiinflamatorio, un antidepresivo, combate el reumatismo, las migrañas y los resfriados, y mejora la digestión. Asimismo sus notas picantes le otorgan un sabor delicioso y es agradablemente aromático. Si quieres beneficiarte de todas las propiedades naturales que puede aportarte, en unComo te damos algunas recetas que te mostrarán cómo cocinar el jengibre.
Galletas de jengibre y miel
Para cocinar 25 o 30 de estas deliciosas galletas, primero precalienta el horno a 180ºC y forra con papel sulfurizado o vegetal dos bandejas para horno. A continuación mezcla en un recipiente 225 gramos de harina para repostería con 100 gramos de azúcar, dos cucharaditas de levadura química o polvo de hornear, dos cucharaditas de bicarbonato sódico, media cucharadita de sal, una cucharadita de jengibre en polvo y media cucharadita de canela en polvo.
Luego añade 100 gramos de mantequilla troceada en cubitos para rebanarla en el polvo aplastando la masa, y después mezcla todo bien con 100 gramos de miel. Para preparar las galletas con esa masa, forma bolas con tus manos y rebózalas en azúcar. A continuación colócalas encima de las bandejas, hornéalas aproximadamente 10 minutos y espera a que se enfríen encima de una rejilla.
Té de jengibre
Para hacer té o infusión de jengibre solamente necesitarás medio litro de agua, un bulbo mediano o dos pequeños de jengibre y una cucharada de miel. Este aromático té facilita la digestión y la absorción de nutrientes, pero además también reduce los dolores menstruales al ser ingerido.
En cuanto a la preparación del té, primero pon el agua a hervir mientras troceas los bulbos de jengibre en finas rodajas. A continuación añade el jengibre al agua hirviendo y espera 20 minutos mientras lo calientas a fuego lento. Además, una vez listo debes colar el líquido y si prefieres endulzarlo puedes añadirle una cucharada de miel.
Bizcocho de jengibre
Mientras se precalienta el horno a 180ºC, coloca 185 gramos de harina de repostería y 185 gramos de levadura tamizadas en un recipiente, y asimismo espolvorea 15 gramos de jengibre molido. Luego añade 145 gramos de azúcar moreno, 160 gramos mantequilla preferentemente derretida y tres huevos, y bate estos ingredientes hasta obtener una masa. A continuación trocea 25 gramos de jengibre confitado para añadirlo a esa masa, vierte la mezcla en un molde engrasándola con harina y mantequilla y mételo en el horno durante 35 o 40 minutos.
Si te apetece puedes decorar tu bizcocho de jengibre preparando una mezcla de queso cremoso, una cucharadita de jengibre molido y una pizca de vainilla. Tras combinar los ingredientes, espárcelos sobre el bizcocho a modo de cobertura, y luego coloca por encima unos trozos de jengibre confitado.