Las lesiones son uno de los grandes temores de todo deportista y una de las primeras causas que nos llevan a dejar de practicar ejercicio. En el gimnasio, podemos seguir unas pautas sencillas durante el entrenamiento y adoptar una serie de precauciones de modo que no tengamos ningún daño que nos impida hacer actividad física. En unComo.com te explicamos en detalle cómo evitar lesiones en el gimnasio.
Pasos a seguir: 1Las prisas por ocupar una máquina para evitar que nos la coja otro usuario nos pueden llevar a comenzar a trabajar sin calentar. Esto es un grave error y una de las principales causas de lesiones deportivas, así que antes de lanzarnos a entrenar con los aparatos, debemos hacer una rutina de calentamientos.
2Con las pesas y con otros instrumentos que suponen resistencia no debemos pasarnos. Aprovechando que entrenamos en el gimnasio, podemos acudir al monitor a que nos asesore sobre las medidas justas de resistencias que debemos poner para trabajar nuestros músculos, sin someterlos a un esfuerzo tan grande que nos lesionemos.
3A la hora de determinar cómo evitar lesiones en el gimnasio un punto muy importante es la constancia. Es preferible que acudamos con regularidad al gimnasio y estemos un corto periodo de tiempo, que no acudir muy esporádicamente y permanecer mucho rato. Un cuerpo no acostumbrado al entrenamiento será más propenso a lesionarse.
4Distribuye tu actividad por todas las áreas del gimnasio. Esto no significa que tengas que pasar por todos los aparatos, pero una forma de asegurarte de que estás trabajando todos los aspectos y no centrándote en uno solo, lo que aumentaría el riesgo de lesión, es hacer ejercicio en las distintas zonas del gimnasio.
5Si no sabes cómo usar una máquina, pregunta. La realidad es que algunos aparatos no son muy intuitivos y es necesario saber previamente cómo utilizarlos, especialmente, conocer cuál es la postura adecuada para ejercitarnos. Consúltalo con el monitor o con otro usuario.
6A la hora de evitar lesiones en el gimnasio es básico mantenerse hidratado, así que lleva siempre contigo un pequeño botellín de agua y dale pequeños sorbos, aunque no notes la sed. En este artículo te explicamos cómo hidratarte durante el ejercicio.