Llega el buen tiempo y con él las medidas exprés para lograr conseguir un cuerpo tonificado. Para las mujeres suele ser un poco más complicado el lograr marcar los músculos pero con dieta y, sobre todo, ejercicio conseguirás tener un cuerpo diez este verano.
En primer lugar debes saber que la genética hace mucho. Existen personas que solo con su constitución consiguen marcar músculo sin apenas esfuerzo. Eso sí, la mayoría de las personas deben esforzarse mucho en el gimnasio y, además, mantener una dieta sana y adecuada para conseguir los objetivos propuestos. Debes tenerlo muy claro; dieta sí pero ejercicio también, ambas van de la mano. Para que te resulte más sencillo, en este artículo de unCOMO te damos las claves principales para poder conseguir el cuerpo que siempre has deseado ofreciéndote una dieta para marcar músculos en mujeres. ¿Quieres saber más?, entonces continúa leyendo.
Qué comer para marcar los músculos
La dieta ideal consiste en el aporte óptimo de carbohidratos, proteínas y grasas. Por ello, deberás incrementar el aporte de estos nutrientes y disminuir los alimentos que contengan nutrientes que no son recomendables como el azúcar y las grasas saturadas.
Como todas y cada una de las dietas, se debe acostumbrar a nuestro organismo de forma progresiva para que se adapte a los nuevos cambios alimenticios de la mejor forma posible y no suframos problemas. En este artículo te proponemos una serie de consejos para que consigas acostumbrar a tu cuerpo en cuatro semanas a la nueva forma de alimentación que vas a llevar a partir de ahora.
Dieta para definir músculos en mujeres
A continuación te comentamos detalladamente lo qué debes comer semana a semana para lograr definir y marcar los músculos:
Primera semana
La primera semana, como te decíamos, es clave ya que marcará la respuesta de tu organismo al resto de la dieta. Intenta moderar en la medida de lo posible el consumo de pan, un total de dos rebanadas al día y siempre integral será suficiente. Las proteínas están presentes en el pescado, la carne y los huevos, pero también en las nueces o en las barritas energéticas. Come los tres primeros repartidos en las comidas fuertes del día y el resto entre horas. Muchos dietistas aconsejan tomarlas en dosis pequeñas a lo largo de todo el día (entre 5 y 6 veces).
Segunda semana
No debes picar entre horas, olvídate de ello. Si comes bien las comidas principales tu propia mente lo olvidará de tu rutina. Los fritos están prohibidos, así que si te apetece una ración de patatas fritas debemos decirte que no están presentes en esta dieta y que a partir de la segunda semana debes incluir en tu menú las patatas al horno, hervidas o cocidas, su aporte vitamínico es mayor y su aporte calórico menor.
La verdura no puede faltar en tus comidas, acompáñalas con pescado azul o pechuga de pollo o pavo (sin grasa).
Tercera semana
En esta fase el agua es imprescindible. Tienes que beber, al menos, 2 litros al día y por ello, nada más levantarte te proponemos que bebas un té verde, ya que te ayudará a perder grasa y a eliminar líquidos. El té verde es ideal para complementar una dieta para definir músculos y quemar grasa. No abuses del arroz y la pasta y ni se te ocurra tomar mantequilla. Por supuesto, debes reducir el consumo de azúcar. La carne a la plancha con verduras cocinadas al vapor es lo ideal.
Cuarta semana
En esta fase te proponemos que sigas comiendo carne pero que, en alguna comida, la sustituyas por legumbres, huevos o soja. Recuerda que el aceite de oliva es imprescindible, pero no más de una cucharada al día.
Ejemplo de menú para marcar músculos
Toma nota porque a continuación te ofrecemos una muestra de cómo sería una dieta perfecta si lo que deseas es definir los músculos de todo tu cuerpo:
- Desayuno (800 calorías): cuatro claras de huevo, una taza de avena, una cucharada de mantequilla natural, una naranja y una rebanada de pan integral.
- Almuerzo (700 calorías): una tortilla grande de harina integral, dos cucharadas de mayonesa, una lata de atún, un plátano, una taza de leche y doce almendras.
- Comida (800 calorías): una taza de arroz integral, medio pimiento, media taza de champiñones, media taza de zanahorias y un filete de pechuga de pollo.
- Merienda (700 calorías): una dosis de polvo de proteínas, un plátano, una cucharada de mantequilla natural y un bagel integral.
- Cena (800 calorías): un filete de pollo, una taza de pasta integral, dos pimientos, una taza de leche y de postre, una taza de moras.
Recuerda ir haciendo variaciones para que no se te haga tan pesado seguir la dieta y así te resulte mucho más sencillo convertirlo en tu rutina de alimentación.
Conviértelo en rutina
Llegados a este punto debes tener ya una rutina alimenticia y, seguro, que cada vez te cuesta menos controlar tus ganas de comer cosas no recomendables. Pero debes saber que esta dieta sin ejercicio no sirve para nada. Así que, ve al gimnasio, ponte en manos de un experto y sigue sus pautas. Como te hemos dicho anteriormente la dieta y el ejercicio van de la mano y así debe ser en todo el proceso.
Te recordamos que estar a dieta no significa pasar hambre, tan solo ingerir los alimentos correctos. Comer cada pocas horas hace que tu organismo tenga la energía que necesita y reduces la cantidad de grasas. Elimina, por mucho que te pese, los pasteles y bollería de tu vida y pásate al queso fresco. Bebe agua de forma abundante y, por supuesto, elimina el consumo de alcohol.