Hay un buen número de razones por las que podrías querer esconder alguna masa de galletas en el congelador. Tal vez te guste tener golosinas a mano en caso de que tu hijo llene la casa de amigos. Tal vez quieres hacer un regalo especial.
Masa congelada de galletas significa galletas calientes, y recién horneadas cada vez que quieras. Estas son las mejores maneras de congelar tus galletas favoritas para después.
A los efectos de explicar bien paso a paso como deben congelarse las galletas, vamos a dividirlas en tres categorías: Galletas gruesas, galletas tiernas, galletas de corte
Pasos a seguir: 1Galletas gruesas
Las galletas gruesas como las que tienen chispas de chocolate, u avena con pasas, se congelan mejor si cortas la masa de antemano. Prepara la masa como si estuvieras a punto de hornear, pero luego congela. Una vez congeladas, las bolitas de masa quedan selladas en el interior de una bolsa de plástico para congelar - cuando se necesitan las galletas, sólo tienes que tomar tantas como quieras hornear.
Cubre una bandeja con papel para hornear. Prepara la masa como de costumbre, a continuación, coloca las galletas en la bandeja. Puesto que vas a congelar y no hornear las galletas, puedes dejar las galletas juntas, pero no dejes que se toquen.
Congela las galletas en porciones en la bandeja del horno hasta que estén sólidas, por lo menos durante 6 horas o toda la noche.
Una vez sólidas, se reúnen las galletas en porciones en una bolsa de plástico para congelar u otro recipiente. Quita la mayor cantidad de aire posible, etiqueta la bolsa, y guarda en el congelador hasta por 3 meses.
2Galletas tiernas
Cualquier galleta bastante suave, muy tierna, como galletas de manteca o granuladas. Estas quedan en forma de bastón, envueltas en papel manteca y congeladas. Cuando estés listo para hornear, deja que se calienten durante unos minutos antes de rebanar. Si puedes planear con anticipación la cocción, deja que los bastones se descongelen en el refrigerador durante unas horas.
Prepara la masa como de costumbre. Coloca la masa sobre la superficie de trabajo y forma uno o dos bastones de masa (lo que cabe en tu bolsa para congelar o recipiente).
Envuelve cada uno de los bastones en papel manteca y cierra en los extremos.
Pasa los bastones de masa a una bolsa de plástico para congelar u otro recipiente. Quita la mayor cantidad de aire posible, etiqueta la bolsa, y guarda en el congelador hasta por tres meses.
Al momento de hornear, la masa todavía debe estar fría al tacto y firme, pero ligeramente flexible. Corta las galletas en forma de discos gruesos con un cuchillo.
3Galletas de corte
Por último, pero no menos importante, tenemos las galletas de corte como las galletas de azúcar y muchas galletas navideñas. La masa de estas galletas se puede congelar en discos como capa de pastel. Cuando estés listo para hornear, descongela hasta que quede flexible y continua con la receta.
Prepara la masa como de costumbre. Forma la masa en dos discos de aproximadamente 2 centímetros de espesor.
Envuelve los discos en papel manteca y guárdalos en una bolsa de plástico para congelar o recipiente del congelador. Quita la mayor cantidad de aire posible, etiqueta la bolsa, y guarda en el congelador hasta por tres meses.
Al momento de hornear. Retira uno de los discos del congelador y deja que se caliente a temperatura ambiente. Cuando esté flexible, corta las galletas y hornea según las instrucciones de la receta.