Dentro de las posturas de yoga para principiantes, una de las que más destacan es la que se conoce con el nombre de "perro mirando hacia abajo" o, en sánscrito, Adho Mukha Svanasana. Se trata de uno de los ejercicios más sencillos que se realizan durante una sesión de yoga y que nos ayudar a estirar los músculos de las piernas, de la espalda y de los brazos, además de proporcionarnos una amplia sensación de bienestar. Consigue aumentar, también, la flexibilidad de las rodillas, de la columna vertebral y de las caderas, por eso, es una postura esencial dentro de una rutina de ejercicios. En este artículo de unCOMO vamos a descubrirte los beneficios de la postura del perro mirando hacia abajo en yoga para que conozcas todo lo que esta posición corporal puede llegar a aportarte.
Beneficios de Adho Mukha Svanasana
Comenzamos a descubrirte los beneficios del perro mirando hacia abajo en yoga, una postura perfecta para comenzar a iniciarte en el fascinante mundo del yoga y que te ayudará a aliviar tensiones, relajar tu cuerpo y mejorar la elasticidad de tus músculos. Aquí tienes un listado con todos los beneficios que conseguirás con esta postura:
- Fortalece los huesos: por tanto, se trata de una postura que resulta ideal para evitar enfermedades relacionadas con la salud ósea como, por ejemplo, la osteoporosis
- Músculos más fuertes: otro de los beneficios de la postura del perro mirando hacia abajo en yoga es que consigue tonificar los músculos del cuerpo, sobre todo los que se encuentran en la zona de los brazos y de las piernas
- Oxigena nuestro cuerpo: otro de los beneficios de esta posición es que, al tener el cuerpo en una forma invertida, se mejora la circulación sanguínea haciendo, por tanto, que el oxígeno que se transporta a través de los glóbulos rojos llegue a más zonas del cuerpo
- Reduce las tensiones: esta postura también es perfecta para conseguir reducir la tensión acumulada en el cuerpo al estirar por completo los músculos y las articulaciones y disfrutar de una postura cómoda con la que te sentirás mucho mejor
- Reduce el dolor de cabeza: ya te hemos indicado más arriba que esta postura consigue mejorar la circulación de la sangre y, esto, hace que el oxígeno llegue mejor al cerebro, algo que reduce el dolor de cabeza y/o las migrañas
- Trata los dolores de espalda: otro de los beneficios de la postura del perro mirando hacia abajo en yoga es que consigue reducir los dolores que puedas padecer en la espalda ya que consigues estirar al máximo los músculos de la zona y relajar las tensiones
De todas formas, en unCOMO queremos remarcar que es importante consultar con un médico antes de empezar a hacer yoga o hacerlo, siempre, bajo supervisión de un profesional, sobre todo si se tiene algún tipo de afección.
Cómo hacer la postura del perro mirando hacia abajo correctamente
Ahora que ya conoces los beneficios de la postura del perro mirando hacia abajo, es importante que conozcas cómo se realiza este ejercicio de yoga pues, si no lo haces correctamente, no sentirás los beneficios que anteriormente te hemos comentado y, aún peor, cabe la posibilidad de que puedas hacerte daño en la espalda, en las articulaciones, etcétera.
Así pues, para hacer la asana del perro mirando hacia abajo tienes que seguir estos pasos:
- Lo primero que tienes que hacer es tumbarte boca abajo sobre la esterilla. Entonces, coloca las dos manos juntos al pecho y apoya las palmas en el suelo. Separa ligeramente los pies dejando que se posicionen alineados con tus caderas.
- Ahora tendrás que apoyar tu peso en las cuatro extremidades (las dos manos y los dos pies) separando los dedos para que, así, la presión de tu cuerpo se reparta correctamente por todos tus músculos.
- A continuación tendrás que llevar los glúteos a la zona de los talones, levantar la cadera y elevar los talones para conseguir crear la postura perro mirando hacia abajo, es decir, crear una forma triangular con tu cuerpo respecto al suelo.
- Tienes que aguantar en esta posición llevando el pecho hacia los muslos para, así, estirarte completamente y abrir bien los huesos de la espalda. La cabeza tiene que estar colgado hacia abajo, lo más relajada posible.
Si eres principiante en yoga tienes que saber que te será muy complicado intentar mantener apoyadas las plantas de los pies en el suelo, por eso, lo más normal es que estés de puntillas. No te agobies con esto: es normal. En el yoga tienes que ser consciente de tu cuerpo, escuchar sus necesidades y nunca forzarlo. Ya verás como, poco a poco, aumentará tu flexibilidad y, al final, podrás tener las plantas apoyas en el suelo sin problema alguno.
También puede ser que te cueste sentirte cómodo en esta posición el principio, por eso, un truco para principiantes es que coloques libros gruesos en el suelo y que apoyes ahí las manos. Verás cómo te encuentras más cómodo al principio y como, con el tiempo, tu cuerpo ya podrá estar relajado tocando directamente el suelo.
En este otro artículo de unCOMO te damos algunos consejos que te ayudarán a que sepas cómo empezar a hacer yoga.
Contraindicaciones de la postura del perro mirando hacia abajo
Ya te hemos dicho que la postura del postura del perro mirando hacia abajo nos aporta varios beneficios para nuestra salud y la de nuestro cuerpo. Sin embargo es importante que tengas en cuenta que hay algunas personas que tienen que evitar hacer esta asana o, por lo menos, pedir consejos a un especialista antes de practicarla.
A continuación vamos a descubrirte las principales contraindicaciones de esta postura de yoga:
- Si tienes la presión alta no se recomienda que realices la postura del postura del perro mirando hacia abajo porque la posición podría aumentar la tensión sanguínea
- Si se te dislocan los hombros con facilidad o tienes una lesión en esta zona del cuerpo, se recomienda que no realices esta asana pues podría perjudicarte
- En el caso de que estés embarazada, a partir del quinto o sexto mes de embarazo, no se recomienda que se realice esta asana porque puede producir una fuerte presión en el abdomen. En este otro artículo de unCOMO te descubrimos 5 ejercicios de yoga para embarazadas.
- Las personas que padezcan el síndrome del túnel carpiano tampoco deberían realizar esta asana porque podría aumentar su dolencia.