El agotamiento por ejercicio, si no se atiende, puede tener efectos secundarios debilitantes. Siga leyendo para descubrir si este fenómeno está afectando su entrenamiento y, de ser así, los pasos que puede seguir para combatirlo.
¿Qué es el agotamiento por ejercicio?
¿A menudo te sientes agotado después de un entrenamiento? ¿Alguna vez te subiste a la caminadora con la intención de dar una buena y larga carrera solo para que tu cuerpo se apagara? Si respondió afirmativamente a alguna de estas preguntas, es posible que sufra agotamiento por el ejercicio.
La causa de este fenómeno
Entonces, ¿cuál es la causa del agotamiento del ejercicio o del sobreentrenamiento? La respuesta corta es que su cuerpo necesita tiempo para adaptarse a las mayores exigencias físicas. Esto es especialmente cierto si su cuerpo no está acostumbrado a las demandas físicas adicionales que le impone. ¿Por qué alguien haría eso? Por lo general, hay una fecha límite inminente de algún tipo (una próxima boda o fiesta) que facilita este tipo de sobreentrenamiento. Otras causas pueden tener sus raíces en problemas emocionales o psicológicos, como no sentir que estás a la altura o sufrir un trastorno alimentario.
Conozca las señales de advertencia
Conocer las señales de advertencia del agotamiento por ejercicio puede ser de gran ayuda para reconocer si este fenómeno está afectando su rendimiento. Algunos de los signos físicos y emocionales del exceso de entrenamiento incluyen:
- Disminución del rendimiento :Esto generalmente significa que te sientes incapaz de ir tan lejos como antes o que no puedes ir tan rápido como te gustaría.
- Pérdida de coordinación :Puede sonar aterrador, y si está en una máquina que se mueve rápidamente, puede ser aún más aterrador. Si sus pies o manos no están cooperando, entonces el agotamiento por ejercicio puede ser el culpable.
- Recuperación prolongada :Cuando haces tiene una lesión, ¿le toma mucho tiempo recuperarse (más allá del tiempo de recuperación aceptado)?
- Frecuencia cardíaca matutina elevada :Tener un ritmo cardíaco matutino elevado es un sorprendente efecto secundario del sobreentrenamiento.
- Dolor de cabeza :Toma nota si tienes dolores de cabeza frecuentes.
- Pérdida de apetito :Si bien puede parecer contradictorio, una pérdida sostenida del apetito puede ser motivo de preocupación.
- Dolor muscular crónico :Cuando entrenas, esperas mantener una cantidad razonable de dolor muscular al día siguiente, pero la clave a este síntoma se le llama "crónico". No deberías no tiene dolor crónico. De hecho, en todo caso, sus entrenamientos deberían sentirse más fáciles a medida que avanza.
- Reducción de la autoestima :Esta es más una respuesta emocional al agotamiento por el ejercicio, pero si está entrenando demasiado, puede esperar resultados poco realistas, como perder tres o cuatro libras por semana. A partir de ahí, su autoestima puede verse afectada por pensamientos como "Estoy haciendo todo bien, entonces, ¿por qué esto no funciona?" aumentar.
Soluciones fáciles de seguir
La solución para el agotamiento por ejercicio se puede resumir perfectamente en una palabra:moderación. Espere hasta que su cuerpo le dé el visto bueno y luego aumente gradualmente la intensidad/duración del ejercicio. Tenga en cuenta también que la moderación es "relativa" a su nivel general de condición física y sus objetivos, por lo que compararse con los demás seguramente lo llevará por el camino del jardín. Estos son algunos otros pasos prácticos que puede tomar para sortear los peligros del exceso de entrenamiento:
- No te excedas :Comience una nueva rutina lentamente, por ejemplo, haga ejercicio durante unos veinte minutos y amplíe eso.
- Intenta hacer ejercicio en casa :No solo evitarás cualquier excusa no hacer ejercicio (¡no tienes que viajar a ningún lado!), pero sin nadie cerca, te resultará difícil compararte con los demás.
- Conoce las señales :La pérdida de apetito, la falta de progresión, las lesiones extremas o las lesiones recurrentes pueden indicar motivos de preocupación.
- Cámbialo :Primero, haga ajustes menores a tu rutina cada cuatro semanas. En segundo lugar, cambie completamente su rutina cada ocho o doce semanas . ¿Tercera? No Haz exactamente el mismo entrenamiento en cada sesión. Trate de realizar dos o tres entrenamientos diferentes por semana. Esto debería ayudar a mantener a raya el aburrimiento.
- Un último paso :Trate de hacer algo completamente diferente y único cada pocos meses, como caminar o escalar rocas.