Etapas de desarrollo del autismo

El autismo es un trastorno del desarrollo, y eso significa que los niños en el espectro no siguen la progresión de desarrollo típica que siguen sus compañeros. Aprender a detectar estas diferencias es importante para el diagnóstico. También es interesante saber cómo progresan los niños con autismo a través de las distintas etapas de desarrollo. Esto puede ayudarlo a comprender qué esperar de su hijo y cómo apoyarlo a medida que aprende y crece.

Desarrollo del lenguaje y la comunicación y autismo

Según la Asociación Estadounidense del Habla, Lenguaje y Audición (ASHA, por sus siglas en inglés), muchos niños con trastornos del espectro autista (TEA) exhiben algún tipo de retraso en el lenguaje o desafío relacionado con la comunicación. En algunos casos, esto puede significar que un niño habla a tiempo (o incluso temprano) pero que no usa el lenguaje para comunicar sus necesidades o compartir información. En otros casos, un niño puede ser completamente no verbal. Ocasionalmente, un niño pequeño con un desarrollo típico puede comenzar a perder las habilidades lingüísticas que tenía anteriormente. Dependiendo de la gravedad del retraso, este puede ser uno de los primeros signos de autismo que los padres y pediatras reconocen.

Retraso del lenguaje frente a desarrollo típico

La Universidad de Michigan señala que el desarrollo típico del lenguaje sigue un patrón bastante estándar. Esto es algo de lo que puede esperar de un niño con un desarrollo típico:

A los tres meses - Llorar con un propósito o usar diferentes gritos para diferentes necesidades
A los seis meses - Balbuceo de sonidos consonánticos repetidos ("ba-ba-ba")
Al año - Imitar la inflexión del habla, reconocer el propio nombre y decir al menos una palabra
A los 18 meses - Usar al menos 15 palabras
A los dos años - Comunicar necesidades como "más", saludar y gesticular, hacer sonidos de animales, comprender "no" y usar dos palabras juntas
A los tres años - Usar 450 palabras, hablar en oraciones cortas, identificar partes del cuerpo y colores, y usar algunas palabras en plural
A los cuatro años - Hablar en oraciones de cuatro o más palabras, contar una historia
A los cinco años - Hacer preguntas, hablar en oraciones de al menos cuatro o cinco palabras, usar al menos 1500 palabras diferentes, usar tiempo pasado

La falta de estos hitos puede significar un retraso en el lenguaje, pero es esencial que los padres hagan que un patólogo del habla realice una evaluación formal para estar seguros. Hay muchas causas para un retraso en el lenguaje, y el autismo es solo una de ellas.

Desarrollo del lenguaje en niños con TEA

Por el contrario, un niño con autismo puede desarrollarse de manera diferente. Debido a esto, las edades utilizadas para los compañeros típicos no se aplican a estos niños. En cambio, pueden exhibir las siguientes características y etapas:

Desarrollo desordenado - Debido a que el autismo es un trastorno, el desarrollo del lenguaje en realidad puede ocurrir fuera del orden cronológico. Por ejemplo, un niño de 18 meses puede usar más de 15 palabras pero tiene dificultades para imitar la inflexión del habla regular. Un niño de cinco años puede hablar en oraciones largas pero nunca hacer preguntas ni comunicar sus necesidades a los demás. Un patólogo del habla puede ayudar a crear un programa para un niño que se centre en las áreas específicas de desafío.
Ecolalia - Muchos niños con autismo pasan por una etapa en su desarrollo del lenguaje donde repiten frases que han escuchado de otros o en la televisión. Esto se llama "ecolalia" y no es tan común en niños neurotípicos. Según Communication in Autism de Joanne Arciuli y Jon Brock, la ecolalia puede ayudar a los niños con TEA a aprender cómo se unen las palabras en el habla típica. En muchos casos, cuando han aprendido esta habilidad, dejan el lenguaje repetitivo. En otros casos, pueden seguir usándolo como una forma de autoestimulación verbal.
Retraso en el desarrollo - Aunque algunos niños en el espectro tienen un leve retraso, muchos están más atrasados que sus compañeros. Algunos tienen un retraso severo y todavía son completamente no verbales a la edad de cuatro años. La comunidad médica una vez vio esto como una señal de que un niño nunca hablaría; sin embargo, un estudio de 2013 publicado en la revista Pediatrics encontró que muchos de estos niños con graves retrasos hablaban con fluidez después de los cuatro años. En la mayoría de los casos, la terapia intensiva del habla puede ayudar a los niños a lograr un gran progreso en el desarrollo del lenguaje, y muchos continúan poniéndose al día con sus compañeros.

Desarrollo social y emocional y autismo

Los desafíos sociales son uno de los criterios de diagnóstico básicos para el autismo y, en algunos casos, comienzan muy temprano en el desarrollo. En otras situaciones, un niño puede tener un desarrollo social típico por un tiempo y luego comenzar a retroceder.

Retraso en el desarrollo social versus desarrollo típico

Según PBS, la progresión estándar del desarrollo social implica varios hitos relacionados con la edad. Lo más probable es que un niño con un desarrollo típico se desarrolle de acuerdo con el siguiente patrón:

A los tres meses - Sonriendo, mostrando disfrute de la interacción, respondiendo a la comodidad de los cuidadores
A los seis meses - Riendo, jugando juegos simples como cucú, respondiendo al nombre
Al año - Mostrar angustia por la pérdida de un juguete y ansiedad por la separación de los padres o cuidadores, expresando diferentes emociones, respondiendo a los gestos
A los dos años - Imitar comportamientos de adultos, mostrar frustración, orgullo, afecto y otras emociones
A los tres años - Comprender el género, jugar a fingir, mirar e interactuar con otros niños
A los cuatro años - Participar en el juego, tomar turnos, usar rutinas de juego de simulación más elaboradas
A los cinco años - Agregar más detalles al juego de simulación, tener amistades

Un niño que pierde estos hitos puede o no tener autismo. Si nota que un niño está atrasado en algunas de estas habilidades, hable con un pediatra para que lo remita a un psicólogo infantil para una evaluación formal.

Desarrollo social y emocional en niños con TEA

Cuando se trata del desarrollo social, los niños con autismo no necesariamente progresan de forma lineal. Pueden pasar por alto hitos por completo o simplemente alcanzarlos en un momento posterior. En otros casos, pueden estar al día con algunos de sus hitos y extremadamente atrasados en otros. Muchos niños en el espectro atraviesan las siguientes etapas de desarrollo:

Mejorando gradualmente la teoría de la mente - La teoría de la mente se refiere a la capacidad de comprender que los demás tienen una perspectiva diferente del mundo y de comprender cómo esta perspectiva puede afectar el comportamiento de los demás. Esto puede ser un gran desafío para los niños en el espectro, pero según la Universidad de Indiana en Bloomington, pueden desarrollar algunos aspectos de la teoría de la mente con la terapia y la intervención adecuadas. Pueden comenzar aprendiendo sobre lo que otros ven desde una perspectiva física diferente y expandirse gradualmente para aprender sobre los sentimientos de los demás y los comportamientos previstos en diversas situaciones.
Aprender sobre la reciprocidad - La reciprocidad, o el intercambio básico que ocurre durante una interacción social, es un área desafiante para muchos niños con TEA, según Autism Speaks. Tomar turnos en todas sus formas puede ser un desafío, pero con terapia, los niños pueden comenzar a pulir esta habilidad. A menudo, esto comienza turnándose con juguetes y juegos. Más tarde, el niño puede expandirse para turnarse en conversaciones y situaciones sociales.
Establecer la autorregulación sensorial - Según el Consejo Interdisciplinario sobre Desarrollo y Aprendizaje, una de las etapas más básicas del desarrollo que puede desafiar a los niños en el espectro es la autorregulación. Establecer la autorregulación les permite interesarse por el mundo y las personas que los rodean. Muchos niños en el espectro luchan con trastornos del procesamiento sensorial, lo que significa que reciben demasiada o muy poca información sensorial. Trabajar con un terapeuta ocupacional y aprender sobre las necesidades sensoriales de un niño puede ayudar mucho. Gradualmente, el niño encontrará nuevas formas de satisfacer esas necesidades sensoriales y seguirá prestando atención a las personas que lo rodean.

Desarrollo físico y autismo

Muchos niños en el espectro del autismo muestran un desarrollo físico típico, pero otros pueden mostrar retrasos en esta área. Aquellos con retrasos pueden ponerse al día con sus compañeros con ayuda, o pueden seguir rezagados con respecto a sus compañeros a lo largo del desarrollo. Al igual que con muchos aspectos del TEA, no hay una trayectoria establecida.

Retraso físico versus desarrollo típico

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) informan que los niños con un desarrollo típico alcanzarán los siguientes hitos del desarrollo:

A los cuatro meses - Sosteniendo la cabeza erguida, empujando con las piernas cuando está apoyado en una posición de pie, empujando hacia arriba hasta los codos cuando está acostado boca abajo
A los seis meses - Voltearse en ambos sentidos, comenzando a sentarse con ayuda
Al año - Sentado de forma independiente, tirando para ponerse de pie, desplazándose sobre los muebles
A los 18 meses - Caminar de forma independiente, beber y comer con utensilios
A los dos años - Aprender a correr, subir y bajar escaleras con ayuda, patear una pelota, copiar líneas y círculos al dibujar
A los tres años - Correr, andar en triciclo, subir y bajar escaleras
A los cuatro años - Pararse sobre un pie durante dos segundos, comer con un tenedor, atrapar una pelota
A los cinco años - Pararse sobre un pie durante 10 segundos, usar el baño, saltar

Si un niño no cumple con los hitos físicos para su edad, hable con su pediatra. Incluso si el retraso físico no está relacionado con el autismo, la intervención temprana con un fisioterapeuta o un maestro de educación física adaptada puede ser muy útil.

Desarrollo físico en niños con TEA

Dado que los niños en el espectro pueden o no tener un retraso en el desarrollo físico, es muy posible que un niño pueda seguir la progresión típica de habilidades y no perder hitos físicos. Sin embargo, según un estudio de 2013 publicado en Research in Autism Spectrum Disorders, los retrasos motores tempranos pueden tener un efecto negativo en otros aspectos del comportamiento y el desarrollo de los niños con autismo. Si un niño tiene un retraso motor, es posible que vea algunas de las siguientes etapas de desarrollo:

Desarrollo de proximal a distal - Según Motor Control:Theories, Experiments, and Applications de Frederic Danion, PhD y Mark Latash, PhD, un niño primero debe ser capaz de controlar los músculos y movimientos más grandes antes de pasar a movimientos más finos. Esto se denomina desarrollo de proximal a distal y se aplica al progreso del desarrollo de los niños con autismo. Si un niño tiene problemas con la debilidad central y con tareas como sentarse o ponerse de pie, también tendrá problemas con tareas de motricidad fina como dibujar un círculo. Un fisioterapeuta o un terapeuta ocupacional pueden trabajar con el niño para fortalecer los grupos de músculos más grandes necesarios para estas tareas más delicadas.
Actividad física restringida - Repetir comportamientos y seguir rutinas es algo que tranquiliza a muchos niños con TEA y, según un estudio de 2014 en la revista Autism, puede afectar su desarrollo físico. El estudio encontró que, aunque los niños con TEA hacían la misma cantidad de actividad física que los niños neurotípicos, realizaban menos tipos de actividades. Puede ampliar las habilidades de un niño trabajando en establecer una mayor variedad de actividades físicas que intentará.
Retraso de cabeza extendido - Cuando un bebé está acostado boca arriba y usted tira de sus brazos para ayudarlo a sentarse, puede notar que su cabeza queda rezagada con respecto al resto de su cuerpo. Esto es perfectamente normal en los bebés pequeños, pero según el Instituto Kennedy Krieger, el 90 por ciento de los niños con autismo muestran este retraso mental después de los seis meses de edad. A medida que envejecen, los niños con y sin autismo generalmente superan esta etapa, pero probar el retraso de la cabeza a los seis meses puede ser un predictor útil para determinar qué niños corren el riesgo de tener autismo.

Cosas para recordar sobre el autismo y el desarrollo

Ver a un niño perder hitos puede ser preocupante, pero es importante recordar que los niños con autismo se desarrollan a su propio ritmo. Tenga en cuenta los siguientes consejos mientras trabaja con su hijo:

Debido a que el autismo es un trastorno del desarrollo, los niños en el espectro con frecuencia se desarrollan de una manera que está fuera del orden típico de las cosas. Espere que el niño alcance hitos en diferentes momentos y tal vez no en la progresión que ve en la mayoría de las listas de verificación.
Así como no puede comparar el desarrollo de un niño con TEA con el de un compañero neurotípico, tampoco puede compararlo con otro niño en el espectro. No hay dos niños con autismo iguales. Desafortunadamente, no puede mirar el desarrollo del hijo de un amigo y ver qué hará su hijo a continuación.
Espere un progreso desigual. A veces, un niño parecerá ponerse al día en varios hitos a la vez. Otras veces, parecerá estancarse en una etapa de desarrollo. Recuerde que puede estar progresando y que usted no puede ver en este momento.
Al mismo tiempo, si su instinto le dice que un niño no ha progresado durante un tiempo, hable con su pediatra y el equipo del IEP de la escuela. Es posible que deba idear nuevas metas del IEP o comenzar a trabajar con un tipo diferente de terapeuta.
Recuerde que, en muchos casos, un retraso es solo un retraso. El niño generalmente alcanzará ese hito a su propio ritmo. Por ejemplo, puede jugar juegos de tomar turnos tres años más tarde que sus compañeros, pero eventualmente los jugará.

Progresando

Un niño con autismo pasa por muchas de las etapas típicas de desarrollo, pero es posible que no las pase en los momentos típicos o en el orden establecido. Trabajar con profesionales que se preocupan por el niño y entienden su desarrollo único puede ayudarlo a lograr un progreso maravilloso.