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Cómo secar calabazas

Cuando llega la temporada de calabazas podemos disfrutar de los muchos platos que este versátil alimento nos puede dar. Cremas, salsas, pasteles, dulces y muchas otras alternativas son posibles usando como ingrediente principal la calabaza. Pero además podemos emplearlas como elementos decorativos para darle un hermoso toque a nuestra casa. Si te agrada esta idea, en unComo.com te explicamos cómo secar calabazas y conseguir el resultado deseado.

Pasos a seguir: 1

Elige las calabazas que estén maduras. Toma en cuenta que necesitarás al menos tres centímetros de tallo para secar calabazas, pues es a través de esta zona que la planta eliminará la humedad. Este aspecto es especialmente importante si planeas cortar la calabaza directamente de la planta, por eso tómalo en cuenta.

Además toma en cuenta que mientras más pequeña sea la calabaza más rápido secará, pues suele ser un alimento que toma su tiempo para quedar completamente seco.

2

Lava muy bien la calabaza para eliminar todos los restos de suciedad y tierra que pueda tener. Este proceso debes realizarlo con agua tibia y jabón, no temas dañarla, su cáscara es muy dura y resistente.

Al terminar introduce la calabaza en una mezcla con un poco de lejía (una tapa por ejemplo) y agua caliente, y déjala reposar allí durante 20 minutos, luego lava por última vez con agua fría.

3

Elige un punto de tu hogar que cuente con una buena circulación de aire y al que preferiblemente le dé el sol. Aunque puedes secar la calabaza en el exterior, corres el riesgo de que los insectos y plagas la invadan, por lo que quizá lo mejor es hacerlo dentro de casa. Cada semana deberás voltear la calabaza para dejar expuesta aquella parte que está apoyada.

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Otras buena alternativa es, así como se hace con las setas, colgar la calabaza de alguna estructura resistente y dejarla secando. Lo bueno de esta técnica es que se secará de forma uniforme, sin necesidad de voltearla.

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Las calabazas pueden demorar varias semana en secar, todo dependerá de su tamaño. Sabrás cuando esté seca no solo por su apariencia y color más apagado, sino porque además será muy liviana y se sentirá hueca por dentro. En la mayor parte de los casos podrás escuchar las semillas dentro al agitar la calabaza, como si fuera una especie de maraca.