La sepia es un rico alimento que permite ser cocinado de múltiples formas. Lo podemos cocinar a la plancha, al horno, estofada, con pasta, en espeto o por ejemplo, en su tinta. Cualquiera de estos platos es rico en nutrientes, pero antes de preparar la sepia hay que limpiarla y prepararla correctamente. En unComo te desvelamos los pasos a seguir para limpiar correctamente una sepia.
Pasos a seguir: 1Coge la sepia y con un buen chorro de agua fría, pásala por el grifo. Así eliminarás los primeros restos de suciedad que tenga.
2Todas las sepias están recubiertas de una piel interna. Abre la sepia por la mitad y retira con los dedos, su capa interior. Tira con fuerza para eliminar esa fina capa que es de color transparente.
3Al abrir la sepia, te encontrarás con su espina. Retírala también, ya que para cocinar la sepia, es mejor que la espina no forme parte del plato. Debes tirar con cuidado para que no queden restos.
4Para limpiar la sepia, también se recomienda que retires la bolsa de tinta que tiene en su interior. Si deseas cocinar la sepia en su tinta, reserva esta bolsa para después.
5Pon de nuevo la sepia bajo el grifo para retirar los restos que haya podido dejar la tinta al ser eliminada del interior del pescado.
6Dependiendo de cómo vayas a cocinar la sepia, tendrás que prepararla de una u otra forma. Pero lo normal es cortarla en finas tiras, si lo que quieres es freírla. O bien, abrirla por la mitad y hacerle unos pequeños cortes, si lo que deseas es hacerla al horno o a la plancha.
7Retira con la ayuda de un cuchillo la capa fina que recubre el exterior, como último paso antes de preparar la sepia. Esta piel se elimina con facilidad.
8Para terminar la limpieza de la sepia, lava de nuevo el ejemplar con agua fresca. Recuerda utilizar un buen chorro de agua fría para eliminar cualquier resto. Ahora ya tienes la sepia lista para ser cocinada.