Es fácil que, una vez puesto el arroz a cocer, se nos pegue a la cazuela porque nos hemos despistado un momento. Esto hace que el arroz se rompa, coja un desagradable sabor a quemado y que, además, fregar la olla después sea todo un suplicio. Para que esto no suceda, en el siguiente artículo de unCOMO te mostramos varios trucos sobre cómo evitar que el arroz se pegue.
Por ejemplo, para evitar que el arroz se pegue, un truco es echar una cucharada con aceite de oliva en el agua que usarás para cocerlo. Una vez hierva el agua, añade el arroz con normalidad. El zumo de medio limón también sirve para evitar que se pegue el arroz a la cazuela. Una vez exprimido, añádelo al agua y después cocina como habitualmente lo haces. Estos son algunos consejos efectivos, pero para conocerlos mejor y descubrir más, ¡sigue leyendo!
Cómo usar el aceite de oliva para evitar que se pegue el arroz
Como hemos explicado al inicio, uno de los mejores trucos para que el arroz nos se pegue, y que además enriquece las propiedades y el sabor del plato que haremos, es sencillamente usar el aceite de oliva. Sigue estos pasos para usar el aceite de oliva para hervir arroz y que no se pegue ni se queme:
- Pon a hervir el agua que vayas a necesitar, según la cantidad de arroz que vayas a cocinar.
- Al poco de haber puesto el agua, antes de que empiece a hervir, añade una cucharada de aceite de oliva y sube un poco el fuego.
- En cuanto rompa a hervir el agua con ese poco de aceite, agrega el arroz como harías normalmente, contando las tazas o vasos que vas a necesitar según el plato que cocines.
- En este momento, enseguida de echar el arroz, es recomendable remover bien y dejar el fuego medio y hervir el arroz poco a poco.
Limón para que el arroz no se pegue
Usar limón es otra de las respuestas a la duda de cómo hacer para que el arroz no se pegue a la olla. El zumo o jugo de limón gracias a los ácidos que contiene, principalmente el ácido cítrico, esta fruta es muy efectiva para evitar que los alimentos se peguen en superficies. De hecho, es muy usado para la limpieza del hogar, pero como además el limón tiene grandes beneficios para la salud e incluso puede dar un buen sabor a un arroz blanco sencillo, es ideal para evitar este problema en la cocina.
Solo tienes que exprimir el jugo de medio limón o incluso menos cantidad, dependerá de la cantidad que vayas a cocinar, y agregarlo al agua antes de que empiece a hervir, igual que en el caso del aceite. En canto llegue al punto de ebullición agrega el arroz necesario mientras lo remueves bien y gradúas el fuego. De esta sencilla forma conseguirás un plato bien cocinado, sin que se haya pasado o pegado el arroz.
Usa vinagre para que no se pegue el arroz a la olla
Otro ingrediente que evita que el arroz se pegue al cocinarlo es el vinagre, un efecto que logra gracias a el alto contenido en ácido acético.
Para usarlo con este fin, sencillamente una vez que el agua esté hirviendo en la olla, añade un chorrito de vinagre de vino o de manzana y espera a que vuelva a hervir, pues al añadir el vinagre bajará la temperatura unos instantes. Después, cuando veas que hierve de nuevo, echa el arroz y cocínalo como de costumbre, controlando la intensidad del fuego y removiendo de vez en cuando para que se haga por igual y, de este modo, no se pegará ni se quemará.
Qué hacer si se ha pegado y quemado el arroz
Si por un descuido no has podido evitar que el arroz se pegue, quemándose un poco, y que haya cogido sabor a quemado, todavía puedes arreglarlo, pues hay un truco simple que es muy efectivo.
Cuando veas que se te ha pegado y quemado un poco el arroz, sencillamente, acláralo con abundante agua, escúrrelo y vuelve a ponerlo en una olla con agua, sal y pan. Después de 5 minutos el sabor a quemado del arroz habrá desaparecido y podrás terminar de arreglar el plato como prefieras, retirando el pan.
Consejos para que evitar que el arroz se peque a la olla
Para terminar con estos trucos para que el arroz no se pegue al cocerlo o hervirlo, te dejamos una serie de consejos que te ayudarán a evitarlo y que puede aplicarlos además de lo anteriormente comentado:
- Conoce el tiempo de cocción del arroz: es algo vital conocer cuánto tiempo tarda en cocerse el arroz, de este modo podremos controlar mejor todo el proceso y llegar a evitar que se quede pegado y se queme. Así, aunque hay que tener en cuenta que cada tipo de arroz tiene su tiempo de cocción, lo más habitual es que se tarden unos 15 o 20 minutos, que es lo que tarda el arroz blanco o redondo. No obstante, hay que tener en cuenta que uno tipo arroz integral tardará más o menos 45 minutos en estar listo.
- Elige bien la olla o cacerola: existen gran variedad de cazos, ollas o cacerolas en las que poder hervir o cocinar arroz de distintas formas. Por ello, conviene escoger la que mejor convenga según lo que se desee cocinar. Podemos elegir entre ollas exprés, arroceras al vapor o, sencillamente, ollas o cacerolas en las que no se pegue la comida, es decir, ollas antiadherentes. Elijas la que elijas, es necesario que para evitar que la comida se pegue, el fondo esté en buenas condiciones, sin ralladuras o quemaduras.
- El momento de echar el arroz al agua: algunas personas echan el arroz al principio de poner la olla con agua al fuego. Esto no es lo mejor para cocinar bien el arroz, sino que hay que echarlo cuando el agua empiece a hervir y no antes, ni mucho después.
- Cantidad de arroz: lo más aconsejable es que eches en proporción de 2 tazas de agua y 1 taza de arroz. Siguiendo esta medida base puedes aumentar la cantidad fácilmente. Si echas demasiado alimento a cocer para la cantidad de agua que usas, en poco rato habrá tan poca agua en la cazuela que será fácil que se queme, así con esta proporción puede evitarlo.
- Remueve el arroz: es vital que mientras echas el arroz y/o justo al terminar de echarlo empieces a remover, por ejemplo con una cuchara de palo, y tapa la cazuela. Ve removiendo cada pocos minutos para asegurarte de que no se pega y vuelve a taparlo.
- El fuego lento: aunque tengas mucha prisa, lo mejor es que hagas la cocción a fuego lento, aunque algunos momentos lo subas a medio mientras lo controlas, para que no se desborde el agua ni se pegue la comida.