Comenzar con una dieta saludable puede ser difícil, pero los beneficios son tremendos. Según la Clínica Mayo, una dieta bien balanceada que contenga una variedad de alimentos de cada grupo de alimentos es la mejor opción cuando se trata de satisfacer sus necesidades nutricionales diarias. Una dieta bien balanceada también puede ofrecer protección contra una amplia gama de complicaciones de salud, desde enfermedades cardíacas hasta cáncer. Los siguientes cinco nutrientes no son los únicos que necesita, pero son un punto de partida fácil.
Fibra
Ninguna dieta está completa sin una dosis saludable de fibra todos los días. Este nutriente juega un papel en muchos aspectos de su salud. Ayuda a promover una digestión saludable, protege la salud de los intestinos, ayuda a controlar el azúcar en la sangre y ayuda a mantener bajo control los niveles de colesterol, lo que puede reducir el riesgo de enfermedades del corazón, informa la Clínica Mayo.
Además, la fibra se digiere lentamente, lo que puede ayudarlo a controlar su apetito al mantener la sensación de saciedad durante períodos más prolongados. De hecho, según un estudio publicado en la revista Nutrition, agregar fibra a un plan de comidas para bajar de peso es una forma efectiva de promover el éxito. Sin embargo, muchos estadounidenses no obtienen la cantidad recomendada de fibra en sus dietas. Agregue alimentos ricos en fibra a su dieta para obtener muchos beneficios.
Carbohidratos
Los carbohidratos a menudo tienen mala reputación, pero la verdad es que tu cuerpo los necesita para obtener energía y funcionar bien, según la Clínica Mayo. Los carbohidratos se convierten en glucosa, que su cuerpo usa para alimentar el ejercicio y las actividades diarias. Sin embargo, hay carbohidratos buenos y malos. El truco está en elegir las adecuadas.
Coma carbohidratos complejos, que se digieren lentamente, brindándole energía más duradera. Manténgase alejado de la mayoría de los carbohidratos simples, que le brindan una inyección rápida de energía, pero se queman rápidamente y, a menudo, lo dejan fatigado poco después. Las Pautas dietéticas para estadounidenses de 2015 recomiendan no consumir más del 10 al 15 por ciento de las calorías provenientes de azúcares agregados. Según una investigación de la Escuela de Salud Pública de Harvard, una dieta pobre, que incluye carbohidratos refinados, aumenta el riesgo de depresión hasta en un 41 por ciento.
Incluir carbohidratos en tu dieta no es necesariamente difícil, pero elegir los correctos puede ser complicado. El carbohidrato "malo" ocasional no va a arruinar tus objetivos de salud, pero seguir con la versión más saludable la mayor parte del tiempo es una manera fácil de mantener tus niveles de energía y regular tu estado de ánimo.
Proteína
La proteína es la piedra angular de muchas de las funciones de su cuerpo. Sin ella, corres el riesgo de sufrir multitud de problemas de salud. Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, la proteína es importante porque:
- Ayuda a promover niveles saludables de energía
- Mantiene sanos los huesos, la piel, los músculos y los cartílagos
- Juega un papel en la actividad hormonal y enzimática
La proteína está disponible en una variedad de fuentes de alimentos, por lo que seguramente encontrará algo que le guste comer.
La mayoría de los estadounidenses obtienen suficientes proteínas, pero puede ser complicado elegir las correctas. En general, desea productos lácteos bajos en grasa y cortes magros de carne, que ayudan a mantener bajo control la ingesta de grasas y calorías. Eso se traduce en un peso más saludable y una mejor salud en general.
Vitamina D
La vitamina D juega un papel importante en la salud de los huesos e incluso podría prevenir ciertos tipos de cáncer, incluido el cáncer de mama y de colon, señala la Escuela de Salud Pública de Harvard. Muchos estadounidenses no obtienen suficiente vitamina D, por lo que es hora de comenzar a prestarle atención. La mejor manera de obtener vitamina D es de la luz solar, lo que puede ser difícil durante el invierno o en climas nublados. Desafortunadamente, no está disponible en muchas fuentes de alimentos no enriquecidos, aunque puede consumirlo en alimentos enriquecidos como cereales y leche. Puede incluir una vitamina además de otros alimentos ricos en vitamina D. Hable con su médico acerca de agregar un suplemento a su dieta.
Grasas
Es posible que se sorprenda al descubrir que las grasas son en realidad una parte importante de una dieta saludable. Sin embargo, no todas las grasas son iguales, por lo que es una buena idea familiarizarse con los diferentes tipos para que pueda tomar decisiones saludables. La American Heart Association lo alienta a elegir ácidos grasos poliinsaturados, monoinsaturados y omega-3 y limitar o evitar las grasas trans y las grasas saturadas. Esto asegura que su cuerpo tenga energía y que sus células estén saludables.
Los omega-3 pueden ayudar a prevenir enfermedades del corazón. Las grasas también aíslan el cuerpo y los órganos internos y desempeñan un papel en la producción de hormonas. Por lo tanto, no vale la pena omitirlos por completo.
Haz que comer sea fácil
Con toda esta información, puede parecer que comer sano es demasiado abrumador. No tiene que ser. Al elegir una variedad de alimentos naturales ricos en nutrientes de cada grupo de alimentos y comer todo con moderación, puede obtener los nutrientes que su cuerpo necesita mientras mantiene bajo control la ingesta de calorías y grasas no saludables.
Siga los consejos de las pautas Choose My Plate del USDA y llene la mitad de su plato con frutas y verduras. Divide la otra mitad de tu plato entre proteínas y granos. Con muy poco esfuerzo, se entrenará para tomar decisiones diarias que respalden una buena salud.