La calabaza, también conocida como auyama o zapallo, es uno de los alimentos otoñales más consumidos, y no es para menos. Debido a su tamaño y precio es una hortaliza perfecta y llena de nutrientes para poder realizar todo tipo de recetas. Debido a su característico dulzor, nos puede servir tanto para acompañamientos, como para cremas o postres. Esta gran hortaliza pertenece al mismo grupo que el calabacín o el melón y es en un 90% agua, por lo que su aporte de grasa y calorías es muy bajo y así resulta muy fácil de añadir en una dieta saludable.
Sin embargo, es normal que, si alguna vez te has enfrentado a una calabaza tu solo, te hayas dado cuenta de que te va a costar dar salida a tanta cantidad. Es por eso que mucha gente se pregunta si se puede congelar la calabaza. La respuesta es sí y, en este artículo de unCOMO, te daremos los mejores tips para que aprendas cómo hacerlo para disfrutar de la calabaza cuando quieras.
¿Se puede congelar la calabaza o se estropea?
Una de las dudas que podremos tener cuando nos planteamos congelar la calabaza es si esta aguantará bien el frío o si se echará a perder. Para contestar a esta pregunta debemos preguntarnos primero cuál va a ser su estado cuando nos decidamos por congelarla: cruda, cocinada o en crema.
¿Se puede congelar la calabaza cruda?
Mucha gente opta por esta opción por ser la más rápida y fácil. Y sí, se puede congelar y dejar varias semanas en el congelador sin problemas. Sin embargo, debemos tener en cuenta que, al tener una composición en su mayoría de agua, al descongelarla tendrá un aspecto y una textura más flácida y habrá perdido firmeza.
¿Se puede congelar la calabaza asada?
Otra de las maneras en la que también podemos congelar la calabaza es después de haberla cocinado, por ejemplo, cocida o asada. Lo bueno de usar este método es que, al estar ya cocinada y condimentada, al querer usarla solo habrá que descongelarla y calentarla pero, como decíamos en el caso de la cruda, su textura cambiará un poco por el cambio en el estado del agua, aunque seguirá estando en buen estado para comer.
Aquí puedes leer sobre Cómo hacer la calabaza asada.
¿Se puede congelar la crema de calabaza?
Sin embargo, cuando congelamos calabaza que se ha hecho crema o puré previamente, los resultados están siempre asegurados. Es una de las mejores formas de congelar calabaza y, cuando se quiera descongelar, estará lista para consumir y con el mismo aspecto que recién hecha.
Cómo congelar la calabaza
Si te preguntas cómo conservar calabazas, aquí tienes la respuesta. La calabaza además de ser versátil es agradecida en cuando a su conservación, ya que, aunque no quede exactamente igual que recién comprada puede aguantar mucho tiempo sin perder sus propiedades. A continuación, te explicamos cómo congelarla en función de cómo la vayas a preparar:
- Congelar calabaza cruda: lava, pela y limpia la calabaza hasta que solo quede la carne naranja. Con un buen cuchillo córtala en cuadrados que te quepan en la palma de la mano y procede a meterlos todos en una bolsa apta para el congelado. Aquí puedes leer sobre Cómo pelar una calabaza.
- Congelar calabaza asada: después e lavar y limpiar la calabaza, córtala en rodajas y ponlas en una bandeja de horno con papel metálico. Condiméntala con sal y las especias al gusto, añade un chorrito de aceite de oliva y mételo en el horno hasta que estén blandas y doraditas. El resultado, al igual que en crudo, se debe meter en una bolsa especial para nevera y congelar.
- Congelar crema de calabaza: la crema de calabaza es muy sencilla de hacer y muy versátil. Solo debes poner la calabaza lavada, pelada y limpia, cortada en pedazo en una olla con agua y dejarla hasta que este cocida. Una vez este blanda y se desmenuce, colocar en una trituradora acompañada de las especias que más te gusten y batir hasta que quede una textura cremosa. El resultado lo puedes poner en un recipiente, fiambrera o tupper de plástico y colocarlo en el congelador para congelarlo.
Cómo descongelar la calabaza
Sea como sea la manera que prefieras, ya has podido comprobar que la calabaza ofrece muchas alternativas para congelarla y poder disfrutarla cuando se quiera. Sin embargo, a la hora de descongelarla para su consumo, hay que tener en cuenta el estado en que se congeló para que no se dañe la calabaza:
- Descongelar calabaza cruda: la mejor manera es dejar que se descongele sola en el frigorífico, lo cual suele tardar una noche. Si no tuvieras tanto tiempo, puedes sumergirlo en agua fría.
- Descongelar calabaza asada o cocida: en este caso, también es recomendable dejar que se descongele solo y una vez a temperatura ambiente calentarlo. Sin embargo, si no se dispone de tiempo, se puede meter directamente en el horno ya que éste evaporara el exceso de agua del congelado.
- Descongelar crema de calabaza: puedes, una vez más, dejarlo que se descongele solo. No obstante, como vas a consumir finalmente el contenido de agua en forma de crema, puedes ponerlo directamente en una ola y descongelarlo con calor para consumirlo enseguida.