La mayonesa es una salsa de amplio uso en la cocina hecha básicamente con huevos, aceite y un toque de vinagre o limón. Hacerla casera no es complicado, pero requiere cierta técnica a la hora de lograr que los ingredientes se mezclen perfectamente y emulsionen para conseguir la suave textura característica de este alimento.
La mayonesa siempre ha de conservarse en la nevera pero, pasados unos días sin consumirla, es frecuente preguntarse si sería posible meterla en el congelador para tomarla más adelante. Si haces mayonesa y te sobra, ante posibles dudas, en unCOMO te aclaramos la duda sobre si se puede congelar la mayonesa o no.
¿Se puede congelar la mayonesa o no?
Al ser un alimento elaborado a base de huevo crudo, la mayonesa debe conservarse en la nevera, tanto la casera como la comprada una vez abierto el taro pero, transcurridos unos días, algo más en el caso de las industriales, si no vas a tomarla es posible congelarla. La congelación es uno de los métodos más seguros para conservar los alimentos en buen estado por tiempos prolongados y, efectivamente, la mayonesa sí se puede congelar.
Al hacerlo, hay que tomar una serie de medidas para lograr la óptima conservación y además hay que tener en cuenta que la congelación puede alterar la textura de la delicada salsa. La congelación altera la fusión y emulsión de los ingredientes de la mayonesa haciendo que se separen y es normal que al descongelarla su aspecto (en un primer momento) resulte menos apetecible. Aun así, la respuesta es clara: la mayonesa se puede congelar.
Cómo congelar la mayonesa
La mayonesa se puede congelar, pero para hacerlo con las garantías necesarias para que siga siendo un alimento saludable y de consumo seguro, hay que seguir una serie de pasos y unas recomendaciones importantes:
- La mayonesa debe congelarse cuando se encuentre en perfecto estado, es decir, estando lo más fresca posible. Ante cualquier señal de posible deterioro (está acuosa, presenta alteraciones de color, olores extraños...) por seguridad, es preferible tirarla.
- Extremar la higiene en la manipulación es esencial para evitar cualquier tipo de contaminación del alimento.
- Para congelarla, utiliza recipientes adecuados. Lo mejor es recurrir a frascos de cristal y de cierre hermético, por supuesto resistentes a las temperaturas bajo cero del congelador.
- Esteriliza el recipiente donde vas a congelar la mayonesa y una vez frío y seco, vierte la salsa con ayuda de una cuchara bien limpia.
- Coloca la mayonesa en el tarro presionando ligeramente con la cuchara para eliminar posibles burbujas de aire. Llena el bote dejando uno o dos centímetros de margen hasta el borde superior, porque la congelación hará que la mayonesa se expanda incrementando su volumen (el tarro podría romperse).
- Por último, cierra muy bien el recipiente para que no entre aire y ten la precaución de anotar por fuera la fecha en la que has congelado tu mayonesa.
Cuánto tiempo dura la mayonesa congelada
Generalmente, lo que vas a querer congelar es la mayonesa casera, ya que, la que la que hayas podido comprar en un comercio dura en la propia nevera semanas debido a los conservantes y estabilizantes que incorpora, por lo que, congelarla no tiene demasiado sentido.
En el caso de la mayonesa casera sí puede resultar interesante congelarla, pero debes tener en cuenta que, al contrario de lo que ocurre con otros alimentos, que pueden durar meses en el congelador, la mayonesa no dura más de 5 o 6 días congelada, máximo una semana. Dejarla más tiempo supone que, probablemente, al descongelarla no esté buena.
Te recomendamos echar un vistazo a estos otros artículos sobre Cómo hacer mayonesa fácil y Cómo arreglar la mayonesa cortada.
Cómo descongelar la mayonesa congelada
Si para congelar adecuadamente la mayonesa debes tomar algunas medidas básicas, lo mismo ocurre en el momento de la descongelación. Lo más importante es tener la precaución de sacarla del congelador con tiempo suficiente antes de utilizarla, porque lo ideal es que la mayonesa se descongele lentamente a su ritmo (por supuesto, nada de microondas).
Unas horas antes de tomarla, o mejor, la noche anterior, saca la mayonesa del congelador y colócala en el frigorífico, en la parte baja, que es la que generalmente acumula menos frío. Poco a poco se irá descongelando y podrás terminar el proceso dejando el frasco unos minutos (los menos posible) a temperatura ambiente. De esta manera, podrás evitar que la mayonesa se contamine mientras se descongela.
Cómo saber si la mayonesa descongelada está bien
Es bastante probable que, una vez descongelada, la mayonesa presente un textura muy distinta a la que tenía cuando la congelaste. Ver en el frasco una parte sólida y una sustancia acuosa por encima es normal porque la congelación ha hecho el proceso inverso a la emulsión y lo que ves es el aceite separado del resto de ingredientes. Eso no quiere decir que la mayonesa esté mala, pero para poder tomarla tendrás que emulsionarla de nuevo.
Hay otros signos que sí pueden indicar que la mayonesa descongelada no está bien y a los que es importante prestar atención. Si, una vez descongelada, abres el frasco y notas un olor fuerte, ligeramente ácido, no debes tomarla, lo mismo que si ves zonas más oscuras que destacan en el conjunto. Además, ante la mínima presencia de hongos o bacterias que han provocado moho debes tirarla al completo (no solo la parte afectada). Aquí puedes leer sobre Qué pasa si comes moho.
Cómo emulsionar la mayonesa descongelada
Hay que dejar claro que si haces mayonesa casera lo ideal es consumirla fresca, cuanto antes, pero si la has congelado y la descongelas es posible volver a emulsionarla aunque obtener esa textura perfecta, suave y cremosa, no siempre se consigue.
La mejor manera de lograrlo es batiéndola a mano. Vierte el contenido del frasco en un bol y con un tenedor mezcla primero despacio y con suavidad y cuando los ingredientes comiencen a ligar, bate rápida y enérgicamente. También puedes intentarlo batiendo con batidora eléctrica, empezando a potencia baja e incrementando la velocidad progresivamente.
Un pequeño truco que puede ayudar a que la mayonesa vuelva a ligar es añadirle una yema de huevo batida en el momento de volver a emulsionarla.
Ahora que ya conoces que no es la mejor opción pero que sí es posible congelar la mayonesa, aunque hay que congelarla y descongelarla correctamente para evitar problemas, es decir, a veces puede ser difícil, te recomendamos consultar este otro artículo sobre ¿Se puede congelar la tortilla de patatas?