Las patatas son un alimento imprescindible en la mayoría de gastronomías del mundo, ya que tienen un gran protagonismo en muchas de las preparaciones. Además, se trata de un alimento muy completo, rico en carbohidratos, potasio, vitamina C y minerales como el magnesio y el hierro.
La patata entera puede aguanta muy bien en nuestra despensa, entre seis y siete semanas. No obstante, muchas veces nos encontramos en la situación de tener un par de patatas que se nos van a poner malas. Muchos alimentos se conservan en el congelador sin problema, pero otros se ven seriamente afectados. Si te preguntas si se pueden congelar las patatas o no, ya sean crudas, fritas, en puré o guisadas, sigue leyendo este artículo de unCOMO. Además, descubrirás cómo hacerlo de la manera más eficaz posible. ¡No te lo pierdas!
¿Se pueden congelar las patatas crudas?
Congelar las patatas crudas es posible. No obstante, hay que advertir que el proceso de congelación afecta seriamente a la textura, haciéndola más acuosa. Algo similar sucede con el sabor, que será menos intenso. No esperes una patata como si la acabases de comprar fresca, aunque al menos podrás aprovecharlas todas y no tirarlas.
Lo mejor para que se mantenga en buen estado es congelar la patata cruda pelada. Así que, pélalas y ciérralas en una bolsa hermética o al vacío antes de la congelación. Esto permitirá que se proteja también de la abrasión del frío intenso. De la misma forma, puedes congelar las papas cortadas crudas. El proceso es el mismo que el de la patata entera. Puedes ampliar información en nuestro artículo Cómo conservar las patatas peladas.
¿Se pueden congelar las patatas guisadas?
¿Y congelar los guisos como patatas a la riojana? Sí, claro que se pueden congelar las patatas cocidas en guisos. De hecho, cuando congelamos cualquier tipo de guiso, las patatas ya van incluidas en él. Tan solo debes saber que te encontrarás con el mismo problema expuesto anteriormente: las patatas hervidas congeladas perderán mucha consistencia en el sabor y textura.
Por lo tanto, la alternativa más recomendable es congelar únicamente el guiso preparado. Cuando lo vayas a descongelar para comerlo, puedes preparar de nuevo patatas hervidas cortadas en trozos pequeños. De esta manera, evitarás que el guiso quede demasiado pastoso.
¿Se pueden congelar las patatas fritas para tortilla?
Las patatas fritas congeladas se encuentran en cualquier supermercado, por lo puedes pensar que a priori se pueden congelar sin problema. ¡Cuidado! No debes dejarte guiar por esto, ya que utilizan un proceso industrial de congelado bastante complejo que es inaccesible para un hogar.
Para congelar las patatas fritas para tortilla en casa, sigue estos pasos:
- Corta las patatas y colócalas en un recipiente con agua, sal y un poco de vinagre.
- Fríe las patatas en aceite hasta que queden medio fritas, sin que se doren por completo.
- Retíralas y escurre el aceite para evitar que se queden pegadas entre sí en el congelador.
- Sepáralas individualmente en una bandeja cubierta con papel film e introdúcelas en el congelador.
- Cuando estén medio congeladas, ya puedes introducirlas en una bolsa normal y congelarlas así.
Lo más positivo de las patatas fritas congeladas es que no necesitarás descongelarlas previamente para preparar la tortilla. Tan solo debes freírlas unos minutos más hasta que queden doradas. Si te preguntas cómo congelar el plato ya preparado, no dudes en consultar nuestro artículo ¿Se puede congelar la tortilla de patatas?
¿Se puede congelar el puré de patata?
¿Has preparado puré de patata y te ha sobrado? Puedes congelarlo sin problema. Aunque esté hecho con leche y mantequilla, se conservar bien en el congelador. La textura original se perderá ligeramente una vez lo descongeles, pero la podrás recuperar utilizando de nuevo la batidora.
Evita congelar el puré de patata demasiado caliente, ya que creará una capa de hielo en la superficie que hará que pierda parte del sabor. Espera a que se enfríe a temperatura ambiente y guárdalo en bolsas con cierre hermético para que no se escape ni una gota.
Cómo congelar las patatas correctamente
A continuación, te mostramos los mejores trucos para que descubras cómo congelar patatas correctamente. A pesar de que conlleva problemas con el sabor y la textura, puedes reducir estos inconvenientes de la siguiente manera:
- Recuerda, la mejor manera es congelar las patatas peladas.
- Enciende un fuego, coloca una olla con agua y espera a que comience a hervir.
- Cuando el agua esté hirviendo, añade las patatas y cocina entre cinco y diez minutos. Esto dependerá del tipo de patata que hayas seleccionado o el tamaño.
- Retira las patatas y ponlas en un recipiente con agua y hielo para que se enfríen.
- Seca las patatas para evitar que se genere una capa de hielo alrededor.
- Puedes cortar las patatas o congelarlas enteras, esto no afectará a la calidad.
- Guárdalas en bolsas de congelador o recipientes de cierre hermético para evitar la abrasión del frío intenso.
- De esta forma, las patatas se conservarán durante varios meses.
Sigue estos pasos para congelar papas rellenas, patatas al horno o con cualquier tipo de cocción. Si te preguntas cómo congelar otros alimentos, no te pierdas nuestro artículo ¿Se puede congelar la masa de las croquetas?
Cómo descongelar las patatas
Una vez ya has congelado tus patatas satisfactoriamente, llegará el día en que las necesites de nuevo para preparar alguna receta. A continuación, te mostramos también los mejores trucos para descongelar las patatas correctamente:
- Saca las patatas del congelador y mantenlas en el recipiente hermético.
- Almacena en la nevera durante las 24 o 48 horas previas al cocinado. Cuanto más tiempo puedas esperar, mejor descongeladas estarán.
- También puedes descongelar solo parte del total de patatas. Esto no afectará la calidad de las restantes.
- En situaciones de falta de tiempo, puedes cocinar las patatas para que se descongelen más rápido. Cuenta con que necesitarán un par de minutos extra de cocinado, tanto en patatas crudas como preparadas.
Si buscas opciones rápidas, no te pierdas nuestro artículo Cómo descongelar en el microondas.