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Qué licores de hierbas son los más bebidos

En la gran tradición de licores producidos en todo el mundo, se distinguen varios tipos. En este apartado iremos analizando los licores de hierbas, muy distintos de los licores de fruta y de otros destilados. Estos licores elaborados por distintos tipos de hierbas suelen tomarse después de comidas abundantes como digestivos.

Son muchas las culturas que tienen sus propios licores, y algunas de ellas son preparaciones de larga data, en las que incluyen hierbas y especias. Detrás de cada licor hay una historia y una tradición que depende del contexto cultural en el que el licor se ha producido. De paso vamos enseñando las características principales de los tres licores de hierbas más bebidos en el mundo:

El Amaro

Este licor de hierbas es de origen italiano. Se trata de una combinación de dulce y amargo y se suele tomar como digestivo. Se caracteriza por tener un contenido de alcohol que va desde los 16 a 35 grados y es un líquido macerado que incluye hierbas como genciana, angélica y quina entre otros, también lleva pieles de cítricos, raíces y flores, también se le incluye canela, cardamomo, azafrán entre otras especias.

Se suele tomar con hielo, una rodaja de limón y agua tónica, aunque hay gente que también lo toma solo para apreciar mejor su sabor único. El amaro también tiene varias clases como Tartufo, Carciofo, Alpine, Fernet, Rabarbaro entre otros, los que varían en su preparación y el lugar en donde se elaboran.

Becherovka

Este licor de hierbas es originario de la ciudad checa de de Bohemia, justamente de Karlovy Vary. Se elabora exactamente de 32 hierbas, las cuales se añejan en barricas de roble. Tiene 38 grados de alcohol. Se elabora desde el año 1807, y empezó como una receta secreta del farmacéutico Josef Beche.

Es muy característico encontrarlo en botellas achatadas de color verde, se suele tomar con hielo y con agua tónica, lo que se le conoce como Beton (Be de Becherovka y Ton de agua Tónica).

Chartreuse

Este producto es originario de Francia y su nombre es el del monasterio cartujo de Grande Chartreuse (ubicado en los Alpes franceses), en donde fue elaborado por primera vez. Este licor es elaborado con 130 hierbas, las cuales son maceradas en alcohol de uva, para después ser destiladas, el resultado de este proceso se mezcla con miel destilada y jarabe de azúcar, y finalmente termina siendo añejado en barricas de roble.

Su receta aún sigue siendo un secreto muy bien guardado por los monjes que lo elaboran, los cuales las trasmiten oralmente de generación en generación. Durante un tiempo se elaboró en Cataluña, aunque recientemente se ha vuelto a elaborar en Francia, donde es uno de los digestivos más tomados, tanto en el Norte como en el Sur, especialmente en invierno.