La langosta es un crustáceo con un sabor particular, entre un punto salado y algo dulce, se sirve en diferentes restaurantes como un plato estrella, que normalmente se acompaña con una copa de vino o champaña. Si no estás acostumbrado, el proceso de comerla puede ser un poco complicado, puesto que se necesita de mucha práctica y paciencia además de los utensilios necesarios. Muchas personas la degustan a su manera, debido a que mientras algunos suelen consumirla por piezas, para otros es más sencillo quitar todo el caparazón entero en una vez con el propósito de llegar a la carne más rápidamente. A través de este artículo de unCOMO, aprenderás cómo comer langosta.
Cómo abrir una langosta cocida
Para abrir una langosta cocida hay que seguir estos pasos para conseguir quitar bien el caparazón y poder comer la carne.
- Quita las tenazas: con un tenedor especial para langostas, saca la carne que se encuentra en las tenazas, para ello es necesario colocarla hacia abajo, esto se hace dándole vueltas a la base de cada tenaza. Cuando termines, coloca en el plato las dos tenazas de la langosta. Asegúrate de realizar todo el procedimiento lo más alejado posible de ti para evitar mancharte o bien, cúbrete con una servilleta.
- Retira las patas: para ello, debes seguir un proceso similar al de las tenazas, elimina el caparazón con un palillo de dientes o la punta del cuchillo o el tenedor, de manera que puedas ver la carne.
- Corta la cola: tras haberte desecho de las patas, procede a cortar la cola girando la punta de esta para así sacar la carne que está adentro.
- Abre el caparazón: abre el caparazón y estira para retirarlo con cuidado y para tomar las piezas de carne. Después de este paso, estarás listo para comer las distintas partes de carne de langosta.
Cómo comer langosta paso a paso
En la mayoría de las ocasiones, la langosta se sirve en restaurantes exclusivos. Lo primero que debes tener en cuenta a la hora de comer langostas es que es un plato de marisco delicioso, pero que puede ser algo sucio si no sabes bien cómo comerla. En todo momento, tendrás que hacer uso de tus manos para para abrir las pinzas de la langosta, la cola y el caparazón, entre otras partes, con el propósito de obtener la mayor cantidad de su jugosa carne. Para ello, en el restaurante donde vayas, te suministrarán los siguientes utensilios:
- Pinza para comer langostas: esta guarda ciertas similitudes con un cascanueces y si no tienes uno de estos, tendrás dificultades para llegar a la carne.
- Tenedor especial para langostas: es un tenedor de metal, largo y con la punta fina, con él podrás llegar a los pedazos de carne que suelen ser más complicados de sacar.
- Plato para los restos: este plato servirá.
- Toalla para las manos: al terminar de comer la langosta, debes quitar los restos de grasa o suciedad con esta toalla húmeda, que además suele llevar limón para una mejor limpieza y olor.
- Un servilleta grande: es una buena idea usar, aparte de la servilleta normal, una grande para colocar en el cuello y cubrir la ropa para no mancharnos.
Una vez tengas todos los utensilios y la langosta delante sigue estos pasos para comer langosta:
- Colócate la servilleta en el cuello para evitar mancharte la ropa.
- Empieza a abrir la langosta como hemos explicado antes. Primero retira las tenazas y ábrelas, luego las patas, la cola, la cabeza y el cuerpo o la cola.
- Cuando tengas todo el caparazón retirado en el plato de los restos y los trozos de carne separados, ya podrás comer con facilidad la langosta.
- Puedes comerla tal cual viene cocida con sal o bien, además, puedes añadirle salsa u otros aderezos. Comer la cola de la langosta con salsa es una de las cosas más habituales, ya que es la parte más carnosa y sabrosa.
- Recuerda que tras abrir el caparazón, o también después de comer langosta, conviene que te laves bien las manos con la toalla húmeda.
Consejos para comer langosta
Cocinar una langosta en casa es sencillo, según la receta que vayas a idear puede realizarse a la parrilla o hervida. En caso de hacerlas de la última manera, es importante colocar sal al agua cuando esté hirviendo, de esta manera, los minerales de la langosta se concentrarán. Una vez que estas se encuentren terminadas, se les puede añadir un toque de mayonesa o aceite de oliva en sustitución de la mantequilla derretida. Si vas a optar por prepararla viva en casa, te recomendamos esta otra receta sobre Cómo cocer bogavante y otros mariscos, ya que el procedimiento básico es el mismo.
A la hora de comerla, debes tener en cuenta los siguientes consejos para comer langosta:
- Una de las primeras cosas que hay que hacer es separar la cabeza del cuerpo de la langosta.
- Del mismo modo, abre el exoesqueleto o caparazón para seguir por su abdomen sin llegar a dañar la carne.
- Separa las patas del cuerpo y luego haz lo mismo con las articulaciones de cada pata para sacar la carne.
- Saca la carne con ayuda del tenedor especial mencionado anteriormente, si no dispones de uno, puedes hacerlo con el mango de un cubierto tradicional.
- Luego de sacar toda la carne de la langosta, puedes tomarte el “tomalley”, el jugo que sale de dentro, usándolo para aderezar los trozos de la carne.
- Si lo deseas, puedes comerte las huevas de la langosta hembra.
- Es importante tener en cuenta que la carne de las langostas es sumamente delicada en el sentido de que, en cuanto mueren, esta se descompone rápidamente, por ello se comen enseguida, o bien se congelan.
Si te gustan este tipo de platos, te recomendamos este otro artículo sobre Cómo hacer una parrillada de marisco.